El origen de la conquista de la península [editar]
De acuerdo con las fuentes conservadas, la invasión de la península habría tenido lugar el año 711, una vez concluida la conquista militar musulmana de la mayor parte del norte de África, aunque mucho antes de que tuviera lugar una asimilación militar y religiosa de sus habitantes bereberes.
En aquel momento gobernaba el reino visigodo Roderic (conocido más tarde como Don Rodrigo), quien había accedido al trono a la muerte de Witiza y que se enfrentaba a diversos conflictos sucesorios con los hijos de Witiza.
Como precedentes de la conquista militar, política y social encontramos las acciones de Tarif Abu Zara, básicamente de saqueo, si bien la veracidad de este hecho, así como muchos otros de la conquista musulmana, es discutida por muchos historiadores. Según una leyenda muy improbable, Don Julián, gobernador bizantino de Ceuta, cuya hija, la Caba, había sido violada por Rodrigo, habría proporcionado ayuda logística al ejército musulmán. Sí es más probable la colaboración de Julián con Tariq, general bereber, para proporcionarle la información necesaria sobre la situación política en la península y ofrecerle medios a cambio de no ser presionado militarmente.
En la primavera de 711 una expedición formada por unos 9.000 hombres y mandada por Táriq Ibn Ziyad, gobernador de Tánger, entró en la península sin el conocimiento de Musa ibn Nusair, el gobernador árabe en Ifriqiyya, Túnez. Esta expedición superaría el estrecho el 27 de abril de 711 y conquistaría Algeciras, donde Tariq aumentó el número de hombres y desde donde se enfrentó a Don Rodrigo el 19 de julio de 711, en la batalla de Guadalete, llamada así porque tradicionalmente se localizó junto al río Guadalete, aunque los últimos estudios la sitúan a orillas del río Guadarranque. Un año más tarde, y en saber la noticia, Musa cruzaría el estrecho para las conquistas bereberes al dominio del Imperio Árabe.
En el año 711, las tropas árabes y beréberes del noroeste de Africa cruzaron el estrecho de Gibraltar, derrotaron al ejército visigodo en la batalla de Guadalete y, en poco tiempo, se hicieron con el control de casi toda la península ibérica.
El rápido avance de las tropas musulmanas fue posible por la debilidad del Reino visigodo y la escasa resistencia de su ejército, aunque también contó con la ayuda de las poblaciones, descontentas con dos siglos de autoridad visigoda.
Como en el resto de los territorios conquistados, los musulmanes respetaron a la población autóctona hispanorromana, con la que convivieron pacíficamente. Esta situación facilitó que parte de ella se convirtiera al Islam, los llamados muladíes, mientras que otros, los mozárabes, mantuvieron la fe cristiana.
La expansión musulmana se basó en el establecimiento de guarniciones diseminadas por el territorio, fundamentalmente junto a poblaciones cercanas a las zonas de frontera o a posibles focos de resistencia.
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HOLA TE DEJO ESTA INFO Y LAS LIGAS
SUERTE!!
El origen de la conquista de la península [editar]
De acuerdo con las fuentes conservadas, la invasión de la península habría tenido lugar el año 711, una vez concluida la conquista militar musulmana de la mayor parte del norte de África, aunque mucho antes de que tuviera lugar una asimilación militar y religiosa de sus habitantes bereberes.
En aquel momento gobernaba el reino visigodo Roderic (conocido más tarde como Don Rodrigo), quien había accedido al trono a la muerte de Witiza y que se enfrentaba a diversos conflictos sucesorios con los hijos de Witiza.
Como precedentes de la conquista militar, política y social encontramos las acciones de Tarif Abu Zara, básicamente de saqueo, si bien la veracidad de este hecho, así como muchos otros de la conquista musulmana, es discutida por muchos historiadores. Según una leyenda muy improbable, Don Julián, gobernador bizantino de Ceuta, cuya hija, la Caba, había sido violada por Rodrigo, habría proporcionado ayuda logística al ejército musulmán. Sí es más probable la colaboración de Julián con Tariq, general bereber, para proporcionarle la información necesaria sobre la situación política en la península y ofrecerle medios a cambio de no ser presionado militarmente.
En la primavera de 711 una expedición formada por unos 9.000 hombres y mandada por Táriq Ibn Ziyad, gobernador de Tánger, entró en la península sin el conocimiento de Musa ibn Nusair, el gobernador árabe en Ifriqiyya, Túnez. Esta expedición superaría el estrecho el 27 de abril de 711 y conquistaría Algeciras, donde Tariq aumentó el número de hombres y desde donde se enfrentó a Don Rodrigo el 19 de julio de 711, en la batalla de Guadalete, llamada así porque tradicionalmente se localizó junto al río Guadalete, aunque los últimos estudios la sitúan a orillas del río Guadarranque. Un año más tarde, y en saber la noticia, Musa cruzaría el estrecho para las conquistas bereberes al dominio del Imperio Árabe.
En el año 711, las tropas árabes y beréberes del noroeste de Africa cruzaron el estrecho de Gibraltar, derrotaron al ejército visigodo en la batalla de Guadalete y, en poco tiempo, se hicieron con el control de casi toda la península ibérica.
El rápido avance de las tropas musulmanas fue posible por la debilidad del Reino visigodo y la escasa resistencia de su ejército, aunque también contó con la ayuda de las poblaciones, descontentas con dos siglos de autoridad visigoda.
Como en el resto de los territorios conquistados, los musulmanes respetaron a la población autóctona hispanorromana, con la que convivieron pacíficamente. Esta situación facilitó que parte de ella se convirtiera al Islam, los llamados muladíes, mientras que otros, los mozárabes, mantuvieron la fe cristiana.
La expansión musulmana se basó en el establecimiento de guarniciones diseminadas por el territorio, fundamentalmente junto a poblaciones cercanas a las zonas de frontera o a posibles focos de resistencia.