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Las fuentes de la creatividad son inagotables. Este libro así lo demuestra. El autor nos presenta una obra que sorprende y que sin duda es diferente. Este libro es una peculiar forma de narrar con unos ingredientes que hacen que sea “devorado con avidez”. Ameno y divertido, serio y profundo, de denuncia y esperanza, constituye un toque de atención a la especie humana. Yo...¡cocodrilo! basa su mensaje en un original argumento: la historia de dos peculiares personajes: un directivo/ejecutivo, es decir un “genuino representante de nuestro mundo” y un cocodrilo, un animal muy, pero muy primitivo. Son dos vidas paralelas que se entrecruzan. En cada caso, un recorrido desde antes de su nacimiento hasta su muerte, incluyendo su legado póstumo. ¿Quién gana la partida de la vida? Una obra entrañable que a nadie dejará indiferente.

Yo...¡cocodrilo! basa su mensaje en un original argumento: la historia de dos peculiares personajes: un directivo/ejecutivo, es decir un “genuino representante de nuestro mundo” y un cocodrilo, un animal muy, pero muy primitivo. Son dos vidas paralelas que se entrecruzan. En cada caso, un recorrido desde antes de su nacimiento hasta su muerte, incluyendo su legado póstumo.

Este es un libro que: denuncia la educación y comportamientos familiares poco edificantes y ejemplarizantes; denuncia a las empresas que sólo se orientan a los beneficios olvidándose de su función social y de las personas; denuncia a los políticos incompetentes que están a su propio servicio y al de los poderosos, pasándose por el “arco del triunfo” los más elementales derechos humanos; denuncia la destrucción acelerada del planeta sin que nadie haga nada por evitarlo. ¿Por qué leer éste libro? Porque el día a día nos impide hacer una reflexión sobre las cosas que estamos haciendo y sobre cómo estamos actuando. Y por eso es necesario hacer un “pare” en el camino y reflexionar para compararnos. En esta ocasión con un cocodrilo.