solo treinta ni más ni menos
El primer beso
Yo ya me despedía.... y palpitante
cerca mi labio de tus labios rojos,
«Hasta mañana», susurraste;
yo te miré a los ojos un instante
y tú cerraste sin pensar los ojos
y te di el primer beso: alcé la frente
iluminado por mi dicha cierta.
Salí a la calle alborozadamente
mientras tu te asomabas a la puerta
mirándome encendida y sonriente.
Volví la cara en dulce arrobamiento,
y sin dejarte de mirar siquiera,
salté a un tranvía en raudo movimiento;
y me quedé mirándote un momento
y sonriendo con el alma entera,
y aún más te sonreí... Y en el tranvía
a un ansioso, sarcástico y curioso,
que nos miró a los dos con ironía,
le dije poniéndome dichoso:
-«Perdóneme, Señor esta alegría.»
aqui va otro mas largo porsiacaso
Tu risa
Quítame el pan si quieres
quítame el aire, pero
no me quites tu risa.
No me quites la rosa,
la lanza que desgranas,
el agua que de pronto
estalla en tu alegría,
la repentina ola
de planta que te nace.
Mi lucha es dura y vuelo
con los ojos cansados
a veces de haber visto
la tierra que no cambia,
pero al entrar tu risa
sube al cielo buscándome
y abre para mí todas
las puertas de la vida.
Amor mío, en la hora
más oscura desgrana
tu risa, y si de pronto
ves que mi sangre mancha
las piedras de la calle,
ríe, porque tu risa
será para mis manos
como una espada fresca.
Junto al mar en otoño,
tu risa debe alzar
su cascada de espuma,
y en primavera, amor,
quiero tu risa como
la flor que yo esperaba,
la flor azul, la rosa
de mi patria sonora.
Ríe de la noche
del día, de la luna,
ríete de las calles
torcidas de la isla,
ríete del torpe
muchacho que te quiere,
pero cuando yo abro
los ojos y los cierro,
cuando mis pasos van,
cuando vuelven mis pasos,
niégame el pan, el aire,
la luz, la primavera,
pero tu risa nunca
porque me moriría
Una foto En la Playa
Aún plasmada en celulosa
Transmitía cegadora belleza
Sus ojos brillantes
Rojos como cerezas
Penetraban el alma
Su refinada nariz
Hermosa y respingada
La sonrisa enmarcada
Entre dos labios carnosos
Con marfil ornamentada
Su perfectamente tersa piel
De un blanco maravilloso
Cual lienzo de Afrodita
Sostenía el hermoso ser
Que era esa mujer
A pesar de no ser delgada
Ni tener piernas torneadas
No era fea para nada
En su aspecto general
Vestía una falda roja
Que cubría hasta las rodillas
Y una blusa rosada
Bastante femenina
Esto la hacía resaltar aún más
Contra el verde fondo
De la arena y el mar
Aquella bella dama
Que acabo de dibujar
Era mi amada Rosalía
En una foto en la playa.
Es de mi autoría, lo hice para la ocasión.
si
Copyright © 2024 Q2A.ES - All rights reserved.
Answers & Comments
Verified answer
El primer beso
Yo ya me despedía.... y palpitante
cerca mi labio de tus labios rojos,
«Hasta mañana», susurraste;
yo te miré a los ojos un instante
y tú cerraste sin pensar los ojos
y te di el primer beso: alcé la frente
iluminado por mi dicha cierta.
Salí a la calle alborozadamente
mientras tu te asomabas a la puerta
mirándome encendida y sonriente.
Volví la cara en dulce arrobamiento,
y sin dejarte de mirar siquiera,
salté a un tranvía en raudo movimiento;
y me quedé mirándote un momento
y sonriendo con el alma entera,
y aún más te sonreí... Y en el tranvía
a un ansioso, sarcástico y curioso,
que nos miró a los dos con ironía,
le dije poniéndome dichoso:
-«Perdóneme, Señor esta alegría.»
aqui va otro mas largo porsiacaso
Tu risa
Quítame el pan si quieres
quítame el aire, pero
no me quites tu risa.
No me quites la rosa,
la lanza que desgranas,
el agua que de pronto
estalla en tu alegría,
la repentina ola
de planta que te nace.
Mi lucha es dura y vuelo
con los ojos cansados
a veces de haber visto
la tierra que no cambia,
pero al entrar tu risa
sube al cielo buscándome
y abre para mí todas
las puertas de la vida.
Amor mío, en la hora
más oscura desgrana
tu risa, y si de pronto
ves que mi sangre mancha
las piedras de la calle,
ríe, porque tu risa
será para mis manos
como una espada fresca.
Junto al mar en otoño,
tu risa debe alzar
su cascada de espuma,
y en primavera, amor,
quiero tu risa como
la flor que yo esperaba,
la flor azul, la rosa
de mi patria sonora.
Ríe de la noche
del día, de la luna,
ríete de las calles
torcidas de la isla,
ríete del torpe
muchacho que te quiere,
pero cuando yo abro
los ojos y los cierro,
cuando mis pasos van,
cuando vuelven mis pasos,
niégame el pan, el aire,
la luz, la primavera,
pero tu risa nunca
porque me moriría
Una foto En la Playa
Aún plasmada en celulosa
Transmitía cegadora belleza
Sus ojos brillantes
Rojos como cerezas
Penetraban el alma
Su refinada nariz
Hermosa y respingada
La sonrisa enmarcada
Entre dos labios carnosos
Con marfil ornamentada
Su perfectamente tersa piel
De un blanco maravilloso
Cual lienzo de Afrodita
Sostenía el hermoso ser
Que era esa mujer
A pesar de no ser delgada
Ni tener piernas torneadas
No era fea para nada
En su aspecto general
Vestía una falda roja
Que cubría hasta las rodillas
Y una blusa rosada
Bastante femenina
Esto la hacía resaltar aún más
Contra el verde fondo
De la arena y el mar
Aquella bella dama
Que acabo de dibujar
Era mi amada Rosalía
En una foto en la playa.
Es de mi autoría, lo hice para la ocasión.
si