Los meses no coinciden exactamente con los meses del calendario gregoriano, al empezar siempre la cuenta de los meses con el inicio astronómico de las Estaciones. Tal y como se hace también con el Zodiaco griego. Los nombres de los meses adoptan denominaciones de fenómenos naturales y de la agricultura:
Otoño (terminación -aire):
• Vendémiaire (del latín vindemia "vendimia") a partir del 22, 23 ó 24 de septiembre
• Brumaire (del francés brume "bruma") a partir del 22, 23 ó 24 de octubre
• Frimaire (del francés frimas "escarcha") a partir del 21, 22 ó 23 de noviembre
Invierno (terminación -ôse):
• Nivôse (del latín nivosus "nevado") a partir del 21, 22 ó 23 de diciembre
• Pluviôse (del latín pluviosus "lluvioso") a partir del 20, 21 ó 22 de enero
• Ventôse (del latín ventosus "ventoso") a partir del 19, 20 ó 21 de febrero
Primavera (terminación -al):
• Germinal (del latín germen "semilla") a partir del 20 ó 21 de marzo
• Floréal (del latín flos "flor") a partir del 20 ó 21 de abril
• Prairial (del francés prairie "pradera") a partir del 20 ó 21 de mayo
Verano (terminación -idor):
• Messidor (del latín messis "cosecha") a partir del 19 ó 20 de junio
• Thermidor (del griego thermos "calor") a partir del 19 ó 20 de julio
• Fructidor (del latín fructus "fruta") a partir del 18 ó 19 de agosto
A los días de la década (la nueva semana de diez días) se propuso darles el nombre de personajes ilustres de la Revolución, pero el consenso era difícil y se corría el riesgo de deificarlosFinalmente se le atribuyó a los días de cada década nombres numéricos tomados del latín: Primidi, duodi, tridi, quartidi, quintidi, sextidi, septidi, octidi, nonidi y decadi. El último día de cada década era de descanso. Por otra parte, los días del año, en lugar de asociarlos a un santo, como ocurre en el calendario gregoriano, cada día se asoció con una planta, un animal o una herramienta.
Los defensores más recalcitrantes del sistema métrico decimal insistían en que el día se debía dividir en diez horas, cada hora en cien minutos y cada minuto en cien segundos. Sin embargo esto suponía sustituir todos los relojes, como los de las casas y los de las iglesias, por lo que la idea no resultó viable.Los cinco días (o seis si el año era bisiesto) epagómenos se añadieron al final del mes de Fructidor (final del verano), este periodo se conocía como Franciada. A estos días se les asignaron nombres edificantes: Día de la Virtud, Día del Saber, Día del Trabajo, Día de la Razón, Día de la Gratitud, Día de la Revolución (sólo en años bisiestos). Este día era también llamado Sansculótido, por la gente del pueblo que colaboró con La Toma de la Bastilla y durante la Revolución. A esta gente se les conocía como sans-culottes (sin calzones) o desarrapados.El hecho de añadir los cinco Días Especiales o seis (en años bisiestos), al final del verano no se decidió de forma gratuita. Se hizo así porque de este modo se logra un mejor ajuste con la duración de las estaciones del año en el hemisferio Norte. La duración de la Primavera y el Verano es algo mayor que la del Otoño y el Invierno, siendo ésta es la razón por la que se eligió el final del Verano para añadir los días adicionales. Se puede acusar al calendario revolucionario de estar concebido directamente para el Hemisferio Norte, y se estará en lo cierto. De todas maneras, en el Hemisferio Sur también estaría igual de bien ajustado a las estaciones del año, sólo que cambiando Primavera por Otoño, y Verano por Invierno.
Por otra parte, los años bisiestos en el calendario republicano fueron un punto muy polémico, debido a los requerimientos de comenzar el año en el equinoccio otoñal así como de añadir un día cada cuatro años (como en el calendario gregoriano). Aunque los años III, VII y XI fueron considerados años bisiestos, y los años XV y ** también se planificaron como tales, nunca se desarrolló un algoritmo para determinar los años bisiestos después del año **, debido a la abolición del calendario.
El calendario fue de aplicación civil en Francia y sus colonias americanas y africanas hasta su abolición por Napoleón el 1 de enero de 1806, es decir la medianoche del 10 de nivoso del año XIV, más concretamente, el 31 de diciembre de 1805, poco más de 12 años después de su introducción. El motivo era el ánimo de Napoleón de eliminar los signos de democracia republicana, tras su autoproclamación como emperador en diciembre de 1804 habiendo creado la nueva nobleza imperial al año siguiente. Ambos conceptos eran incompatibles con la naturaleza de este calendario, así como también para conseguir una reconciliación con la Iglesia y el papado, de los que consiguió una cierta tolerancia al devolver las festividades civiles y religiosas. Varias décadas después, en 1871, fue brevemente reinstaurado por la Comuna de París, durante varios meses.Este calendario estaba dentro de las medidas encaminadas a la sustitución de los antiguos sistemas tradicionales de medición y peso, por el sistema métrico decimal, muy superior desde el punto de vista racional.
También puede considerarse hasta cierto punto un intento de descristianización de la sociedad, con el uso de un nuevo calendario totalmente basado en la Razón, ya que los calendarios juliano y gregoriano utilizados hasta entonces, tienen importantes implicaciones cristianas.Presenta ventajas como: el mismo calendario sirve para todos los años, todos los meses tienen la misma duración. Tiene una mayor precisión frente a la duración real del año trópico, tiene un menor intervalo de corrección, presenta un mejor ajuste frente a las estaciones del año, ofrece una mayor facilidad para establecer el horario de ahorro de luz de verano, existen el año cero y el siglo cero lo que supone una mayor racionalidad y menor arbitrariedad.
• Vendémiaire (del latín vindemia "vendimia") a partir del 22, 23 ó 24 de septiembre
• Brumaire (del francés brume "bruma") a partir del 22, 23 ó 24 de octubre
• Frimaire (del francés frimas "escarcha") a partir del 21, 22 ó 23 de noviembre
Invierno (terminación -ôse):
• Nivôse (del latín nivosus "nevado") a partir del 21, 22 ó 23 de diciembre
• Pluviôse (del latín pluviosus "lluvioso") a partir del 20, 21 ó 22 de enero
• Ventôse (del latín ventosus "ventoso") a partir del 19, 20 ó 21 de febrero
Primavera (terminación -al):
• Germinal (del latín germen "semilla") a partir del 20 ó 21 de marzo
• Floréal (del latín flos "flor") a partir del 20 ó 21 de abril
• Prairial (del francés prairie "pradera") a partir del 20 ó 21 de mayo
Verano (terminación -idor):
• Messidor (del latín messis "cosecha") a partir del 19 ó 20 de junio
• Thermidor (del griego thermos "calor") a partir del 19 ó 20 de julio
• Fructidor (del latín fructus "fruta") a partir del 18 ó 19 de agosto
A los días de la década (la nueva semana de diez días) se propuso darles el nombre de personajes ilustres de la Revolución, pero el consenso era difícil y se corría el riesgo de deificarlos. Finalmente se le atribuyó a los días de cada década nombres numéricos tomados del latín: Primidi, duodi, tridi, quartidi, quintidi, sextidi, septidi, octidi, nonidi y decadi.
Si quieres ser un buen emprendedor entonces necesitas el Instituto De Capacitación Para Emprendedores Y Dueños De Pequeños Negocios de aquí https://tr.im/1958U ¡Nada más! Así que, no hay exigencia de preocuparse más porque este programa te dirá exactamente qué es lo que tienes que hacer para obtener los mejores resultados absolutos con la mínima inversión de tiempo y esfuerzo. ¡Esto verdaderamente es variar tu vida en una fácil!
Sin duda, la capacitación en línea es el futuro de la educación. Consciente de ello, este instituto quiere contribuir ayudando a formar emprendedores exitosos y evitando el fracaso de un negocio. Con este instituto escogerás lo mejor para ti, escogerás ser un empresario de éxito aunque tienes un negocio pequeño.
el calendario era diferente al gregoriano de hoy y estaba relacionado a los ciclos de la naturaleza y la semana tenia diez dias.
Otoño (terminación -aire):
• Vendémiaire (del latín vindemia "vendimia") a partir del 22, 23 ó 24 de septiembre
• Brumaire (del francés brume "bruma") a partir del 22, 23 ó 24 de octubre
• Frimaire (del francés frimas "escarcha") a partir del 21, 22 ó 23 de noviembre
Invierno (terminación -ôse):
• Nivôse (del latín nivosus "nevado") a partir del 21, 22 ó 23 de diciembre
• Pluviôse (del latín pluviosus "lluvioso") a partir del 20, 21 ó 22 de enero
• Ventôse (del latín ventosus "ventoso") a partir del 19, 20 ó 21 de febrero
Primavera (terminación -al):
• Germinal (del latín germen "semilla") a partir del 20 ó 21 de marzo
• Floréal (del latín flos "flor") a partir del 20 ó 21 de abril
• Prairial (del francés prairie "pradera") a partir del 20 ó 21 de mayo
Verano (terminación -idor):
• Messidor (del latín messis "cosecha") a partir del 19 ó 20 de junio
• Thermidor (del griego thermos "calor") a partir del 19 ó 20 de julio
• Fructidor (del latín fructus "fruta") a partir del 18 ó 19 de agosto
A los días de la década (la nueva semana de diez días) se propuso darles el nombre de personajes ilustres de la Revolución, pero el consenso era difícil y se corría el riesgo de deificarlos. Finalmente se le atribuyó a los días de cada década nombres numéricos tomados del latín: Primidi, duodi, tridi, quartidi, quintidi, sextidi, septidi, octidi, nonidi y decadi.
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Los meses no coinciden exactamente con los meses del calendario gregoriano, al empezar siempre la cuenta de los meses con el inicio astronómico de las Estaciones. Tal y como se hace también con el Zodiaco griego. Los nombres de los meses adoptan denominaciones de fenómenos naturales y de la agricultura:
Otoño (terminación -aire):
• Vendémiaire (del latín vindemia "vendimia") a partir del 22, 23 ó 24 de septiembre
• Brumaire (del francés brume "bruma") a partir del 22, 23 ó 24 de octubre
• Frimaire (del francés frimas "escarcha") a partir del 21, 22 ó 23 de noviembre
Invierno (terminación -ôse):
• Nivôse (del latín nivosus "nevado") a partir del 21, 22 ó 23 de diciembre
• Pluviôse (del latín pluviosus "lluvioso") a partir del 20, 21 ó 22 de enero
• Ventôse (del latín ventosus "ventoso") a partir del 19, 20 ó 21 de febrero
Primavera (terminación -al):
• Germinal (del latín germen "semilla") a partir del 20 ó 21 de marzo
• Floréal (del latín flos "flor") a partir del 20 ó 21 de abril
• Prairial (del francés prairie "pradera") a partir del 20 ó 21 de mayo
Verano (terminación -idor):
• Messidor (del latín messis "cosecha") a partir del 19 ó 20 de junio
• Thermidor (del griego thermos "calor") a partir del 19 ó 20 de julio
• Fructidor (del latín fructus "fruta") a partir del 18 ó 19 de agosto
A los días de la década (la nueva semana de diez días) se propuso darles el nombre de personajes ilustres de la Revolución, pero el consenso era difícil y se corría el riesgo de deificarlosFinalmente se le atribuyó a los días de cada década nombres numéricos tomados del latín: Primidi, duodi, tridi, quartidi, quintidi, sextidi, septidi, octidi, nonidi y decadi. El último día de cada década era de descanso. Por otra parte, los días del año, en lugar de asociarlos a un santo, como ocurre en el calendario gregoriano, cada día se asoció con una planta, un animal o una herramienta.
Los defensores más recalcitrantes del sistema métrico decimal insistían en que el día se debía dividir en diez horas, cada hora en cien minutos y cada minuto en cien segundos. Sin embargo esto suponía sustituir todos los relojes, como los de las casas y los de las iglesias, por lo que la idea no resultó viable.Los cinco días (o seis si el año era bisiesto) epagómenos se añadieron al final del mes de Fructidor (final del verano), este periodo se conocía como Franciada. A estos días se les asignaron nombres edificantes: Día de la Virtud, Día del Saber, Día del Trabajo, Día de la Razón, Día de la Gratitud, Día de la Revolución (sólo en años bisiestos). Este día era también llamado Sansculótido, por la gente del pueblo que colaboró con La Toma de la Bastilla y durante la Revolución. A esta gente se les conocía como sans-culottes (sin calzones) o desarrapados.El hecho de añadir los cinco Días Especiales o seis (en años bisiestos), al final del verano no se decidió de forma gratuita. Se hizo así porque de este modo se logra un mejor ajuste con la duración de las estaciones del año en el hemisferio Norte. La duración de la Primavera y el Verano es algo mayor que la del Otoño y el Invierno, siendo ésta es la razón por la que se eligió el final del Verano para añadir los días adicionales. Se puede acusar al calendario revolucionario de estar concebido directamente para el Hemisferio Norte, y se estará en lo cierto. De todas maneras, en el Hemisferio Sur también estaría igual de bien ajustado a las estaciones del año, sólo que cambiando Primavera por Otoño, y Verano por Invierno.
Por otra parte, los años bisiestos en el calendario republicano fueron un punto muy polémico, debido a los requerimientos de comenzar el año en el equinoccio otoñal así como de añadir un día cada cuatro años (como en el calendario gregoriano). Aunque los años III, VII y XI fueron considerados años bisiestos, y los años XV y ** también se planificaron como tales, nunca se desarrolló un algoritmo para determinar los años bisiestos después del año **, debido a la abolición del calendario.
El calendario fue de aplicación civil en Francia y sus colonias americanas y africanas hasta su abolición por Napoleón el 1 de enero de 1806, es decir la medianoche del 10 de nivoso del año XIV, más concretamente, el 31 de diciembre de 1805, poco más de 12 años después de su introducción. El motivo era el ánimo de Napoleón de eliminar los signos de democracia republicana, tras su autoproclamación como emperador en diciembre de 1804 habiendo creado la nueva nobleza imperial al año siguiente. Ambos conceptos eran incompatibles con la naturaleza de este calendario, así como también para conseguir una reconciliación con la Iglesia y el papado, de los que consiguió una cierta tolerancia al devolver las festividades civiles y religiosas. Varias décadas después, en 1871, fue brevemente reinstaurado por la Comuna de París, durante varios meses.Este calendario estaba dentro de las medidas encaminadas a la sustitución de los antiguos sistemas tradicionales de medición y peso, por el sistema métrico decimal, muy superior desde el punto de vista racional.
También puede considerarse hasta cierto punto un intento de descristianización de la sociedad, con el uso de un nuevo calendario totalmente basado en la Razón, ya que los calendarios juliano y gregoriano utilizados hasta entonces, tienen importantes implicaciones cristianas.Presenta ventajas como: el mismo calendario sirve para todos los años, todos los meses tienen la misma duración. Tiene una mayor precisión frente a la duración real del año trópico, tiene un menor intervalo de corrección, presenta un mejor ajuste frente a las estaciones del año, ofrece una mayor facilidad para establecer el horario de ahorro de luz de verano, existen el año cero y el siglo cero lo que supone una mayor racionalidad y menor arbitrariedad.
Otoño (terminación -aire):
• Vendémiaire (del latín vindemia "vendimia") a partir del 22, 23 ó 24 de septiembre
• Brumaire (del francés brume "bruma") a partir del 22, 23 ó 24 de octubre
• Frimaire (del francés frimas "escarcha") a partir del 21, 22 ó 23 de noviembre
Invierno (terminación -ôse):
• Nivôse (del latín nivosus "nevado") a partir del 21, 22 ó 23 de diciembre
• Pluviôse (del latín pluviosus "lluvioso") a partir del 20, 21 ó 22 de enero
• Ventôse (del latín ventosus "ventoso") a partir del 19, 20 ó 21 de febrero
Primavera (terminación -al):
• Germinal (del latín germen "semilla") a partir del 20 ó 21 de marzo
• Floréal (del latín flos "flor") a partir del 20 ó 21 de abril
• Prairial (del francés prairie "pradera") a partir del 20 ó 21 de mayo
Verano (terminación -idor):
• Messidor (del latín messis "cosecha") a partir del 19 ó 20 de junio
• Thermidor (del griego thermos "calor") a partir del 19 ó 20 de julio
• Fructidor (del latín fructus "fruta") a partir del 18 ó 19 de agosto
A los días de la década (la nueva semana de diez días) se propuso darles el nombre de personajes ilustres de la Revolución, pero el consenso era difícil y se corría el riesgo de deificarlos. Finalmente se le atribuyó a los días de cada década nombres numéricos tomados del latín: Primidi, duodi, tridi, quartidi, quintidi, sextidi, septidi, octidi, nonidi y decadi.
Si quieres ser un buen emprendedor entonces necesitas el Instituto De Capacitación Para Emprendedores Y Dueños De Pequeños Negocios de aquí https://tr.im/1958U ¡Nada más! Así que, no hay exigencia de preocuparse más porque este programa te dirá exactamente qué es lo que tienes que hacer para obtener los mejores resultados absolutos con la mínima inversión de tiempo y esfuerzo. ¡Esto verdaderamente es variar tu vida en una fácil!
Sin duda, la capacitación en línea es el futuro de la educación. Consciente de ello, este instituto quiere contribuir ayudando a formar emprendedores exitosos y evitando el fracaso de un negocio. Con este instituto escogerás lo mejor para ti, escogerás ser un empresario de éxito aunque tienes un negocio pequeño.
el calendario era diferente al gregoriano de hoy y estaba relacionado a los ciclos de la naturaleza y la semana tenia diez dias.
Otoño (terminación -aire):
• Vendémiaire (del latín vindemia "vendimia") a partir del 22, 23 ó 24 de septiembre
• Brumaire (del francés brume "bruma") a partir del 22, 23 ó 24 de octubre
• Frimaire (del francés frimas "escarcha") a partir del 21, 22 ó 23 de noviembre
Invierno (terminación -ôse):
• Nivôse (del latín nivosus "nevado") a partir del 21, 22 ó 23 de diciembre
• Pluviôse (del latín pluviosus "lluvioso") a partir del 20, 21 ó 22 de enero
• Ventôse (del latín ventosus "ventoso") a partir del 19, 20 ó 21 de febrero
Primavera (terminación -al):
• Germinal (del latín germen "semilla") a partir del 20 ó 21 de marzo
• Floréal (del latín flos "flor") a partir del 20 ó 21 de abril
• Prairial (del francés prairie "pradera") a partir del 20 ó 21 de mayo
Verano (terminación -idor):
• Messidor (del latín messis "cosecha") a partir del 19 ó 20 de junio
• Thermidor (del griego thermos "calor") a partir del 19 ó 20 de julio
• Fructidor (del latín fructus "fruta") a partir del 18 ó 19 de agosto
A los días de la década (la nueva semana de diez días) se propuso darles el nombre de personajes ilustres de la Revolución, pero el consenso era difícil y se corría el riesgo de deificarlos. Finalmente se le atribuyó a los días de cada década nombres numéricos tomados del latín: Primidi, duodi, tridi, quartidi, quintidi, sextidi, septidi, octidi, nonidi y decadi.