En la profundidad del tiempo miles de años atrás, surgió, en lo que hoy es México una sorprendente cultura madre, cuya pluralidad en tiempo y en espacio ha conservado su raíz filosófica.
Desde tiempos olmecas, pasando por tiempos toltecas y llegando al periodo previo de la conquista con los mexicas existió un hilo conductor que fue hilvanando cada proceso, cada nueva faceta cultural de la misma matriz cuya vigencia alcanza, oculta, la época actual. Esta matriz cultural se puede apreciar en los vestigios arqueológicos y en la iconografía legada de los antepasados y cómo se mantienen a través del tiempo, del espacio y de las culturas que le siguieron, cada una de ellas retoma la matriz y la enriquece razón por la cual el México antiguo se presenta ante nosotros como un mosaico pluricultural cuya esencia o matriz es la misma. Esta profunda esencia cultural no ha sido reconocida por occidente en los tiempos de la conquista porque los españoles no podían validar el desarrollo cultural avanzado de un pueblo al que brutalmente arrasaron y en la actualidad porque la supremacía occidental es avasalladora en los terrenos de la filosofía, la ciencia y la cultura.
Los vestigios de la grandeza cultural sucumbieron en la oscuridad del tiempo y en las mentes de aquellos que fueron dominados a la fuerza, sin embargo el conocimiento profundo ha sobrevivido al sometimiento y al paso de los siglos, transmitiéndose de generación en generación de una manera secreta, y, que por un designio de poder sale a la luz para mostrar a través de los diferentes ángulos parte de nuestras riquezas mágicas, misteriosas y milenarias. Tal fue el caso con el ritual que los mazatecas realizaban desde tiempos remotos con los hongos sagrados.
El hongo sacro fue y sigue siendo el enlace del sabio para llegar a comunicarse con los seres supremos, con los elementos de la naturaleza, con el inframundo, con ellos mismos y de esta forma llega al conocimiento de lo que aqueja a su paciente; el paciente si le es permitido atravesar el umbral, logra atraparte en ese mundo misterioso, mágico, sabio, creativo, tormentoso, su mundo interior que se enlaza con el mundo externo y finalmente forman uno mismo en la existencia de las vidas humanas.
Las plantas mágicas y la conciencia profunda
El manejo de estas plantas sagradas (mal llamadas alucinógenas) ha constituido parte de la experiencia humana a través de los tiempos. Las sociedades occidentales, recientemente han tomado conciencia del significado que ellos han tomado en la formación de los pueblos primitivos así como en las culturas avanzadas.
La tradición mexicana en plantas psicotrópicas sagradas es tan antigua y prolífica como ilustrada a partir de los setenta del siglo XX bajo una visión global-científica literaria y costumbrista. Se ha hecho el esfuerzo por entender desde una perspectiva integral, su estructura química, sus efectos mentales, sus usos tradicionales y medicinales.
Se les menciona a estas como "alucinógenos" quizá por darle un termino mas común y generalizado, aun no entendemos o no queremos entender que son plantas prehispánicas sagradas, psicológicas, curativas. La penicilina de las culturas antiguas.
Estas plantas son complejas en cuanto a su composición química ya que aún no se ha logrado descubrir todo su potencial como auxiliares de ciertas necesidades humanas ya que algunas plantas contienen compuestos químicos capaces de controlar y erradicar malestares físicos psicológicos y la capacidad de obtener mayor conocimiento o sabiduría para comprender y entender la cotidianidad de la vida más allá de nuestros horizontes.
Este reino, sin duda ha sido conocido y empleado por miles de años por el hombre desde sus primeras experiencias con la vegetación, sin embargo no todas estas especies que se encuentran en el reino de los fungís son veneradas con un ritual especial como en México en especial con los mazatecos.
Por su carácter sacro, los aztecas lo llamaban teonanacatl "carne sagrada de dios" y lo utilizaban solamente en sus ceremonias más sagradas nunca con el afán de curiosidad, representaron para las antiguas culturas una forma de estar en comunicación con el cosmos y a través de ellas llegar a las energías supremas.
Peyotes y hongos inducen a un trance; esa búsqueda de dios dentro de uno mismo, dentro de nuestra propia cosmogonía, esta fue la tarea de los sabios de las sociedades primitivas a través de este trance se convertían en intermediarios entre el reino humano y el sobrenatural y eran capaces de comunicarse con los seres supremos, con los muertos, con los demonios, con los espíritus de la naturaleza. Quien ha participado en estas ceremonias con las plantas sacras sabe lo que es un estado de iluminación y ésta se caracteriza especialmente por esos colores vivos que se presentan en esa conciencia visionaria-curativa, la sensibilidad profunda de comprensión y entendimiento de los sentidos, del tiempo y del espacio, del pasado presente y futuro que se convierten
algunas usaban el Peyote, los Hongos alucinógenos el primero en el Centro por San Luis Potosí, el otro en Oaxaca y el sureste Mexicano, pipilzinzintli, te mando estos enlaces ahí encontraras alguna información
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En la profundidad del tiempo miles de años atrás, surgió, en lo que hoy es México una sorprendente cultura madre, cuya pluralidad en tiempo y en espacio ha conservado su raíz filosófica.
Desde tiempos olmecas, pasando por tiempos toltecas y llegando al periodo previo de la conquista con los mexicas existió un hilo conductor que fue hilvanando cada proceso, cada nueva faceta cultural de la misma matriz cuya vigencia alcanza, oculta, la época actual. Esta matriz cultural se puede apreciar en los vestigios arqueológicos y en la iconografía legada de los antepasados y cómo se mantienen a través del tiempo, del espacio y de las culturas que le siguieron, cada una de ellas retoma la matriz y la enriquece razón por la cual el México antiguo se presenta ante nosotros como un mosaico pluricultural cuya esencia o matriz es la misma. Esta profunda esencia cultural no ha sido reconocida por occidente en los tiempos de la conquista porque los españoles no podían validar el desarrollo cultural avanzado de un pueblo al que brutalmente arrasaron y en la actualidad porque la supremacía occidental es avasalladora en los terrenos de la filosofía, la ciencia y la cultura.
Los vestigios de la grandeza cultural sucumbieron en la oscuridad del tiempo y en las mentes de aquellos que fueron dominados a la fuerza, sin embargo el conocimiento profundo ha sobrevivido al sometimiento y al paso de los siglos, transmitiéndose de generación en generación de una manera secreta, y, que por un designio de poder sale a la luz para mostrar a través de los diferentes ángulos parte de nuestras riquezas mágicas, misteriosas y milenarias. Tal fue el caso con el ritual que los mazatecas realizaban desde tiempos remotos con los hongos sagrados.
El hongo sacro fue y sigue siendo el enlace del sabio para llegar a comunicarse con los seres supremos, con los elementos de la naturaleza, con el inframundo, con ellos mismos y de esta forma llega al conocimiento de lo que aqueja a su paciente; el paciente si le es permitido atravesar el umbral, logra atraparte en ese mundo misterioso, mágico, sabio, creativo, tormentoso, su mundo interior que se enlaza con el mundo externo y finalmente forman uno mismo en la existencia de las vidas humanas.
Las plantas mágicas y la conciencia profunda
El manejo de estas plantas sagradas (mal llamadas alucinógenas) ha constituido parte de la experiencia humana a través de los tiempos. Las sociedades occidentales, recientemente han tomado conciencia del significado que ellos han tomado en la formación de los pueblos primitivos así como en las culturas avanzadas.
La tradición mexicana en plantas psicotrópicas sagradas es tan antigua y prolífica como ilustrada a partir de los setenta del siglo XX bajo una visión global-científica literaria y costumbrista. Se ha hecho el esfuerzo por entender desde una perspectiva integral, su estructura química, sus efectos mentales, sus usos tradicionales y medicinales.
Se les menciona a estas como "alucinógenos" quizá por darle un termino mas común y generalizado, aun no entendemos o no queremos entender que son plantas prehispánicas sagradas, psicológicas, curativas. La penicilina de las culturas antiguas.
Estas plantas son complejas en cuanto a su composición química ya que aún no se ha logrado descubrir todo su potencial como auxiliares de ciertas necesidades humanas ya que algunas plantas contienen compuestos químicos capaces de controlar y erradicar malestares físicos psicológicos y la capacidad de obtener mayor conocimiento o sabiduría para comprender y entender la cotidianidad de la vida más allá de nuestros horizontes.
Este reino, sin duda ha sido conocido y empleado por miles de años por el hombre desde sus primeras experiencias con la vegetación, sin embargo no todas estas especies que se encuentran en el reino de los fungís son veneradas con un ritual especial como en México en especial con los mazatecos.
Por su carácter sacro, los aztecas lo llamaban teonanacatl "carne sagrada de dios" y lo utilizaban solamente en sus ceremonias más sagradas nunca con el afán de curiosidad, representaron para las antiguas culturas una forma de estar en comunicación con el cosmos y a través de ellas llegar a las energías supremas.
Peyotes y hongos inducen a un trance; esa búsqueda de dios dentro de uno mismo, dentro de nuestra propia cosmogonía, esta fue la tarea de los sabios de las sociedades primitivas a través de este trance se convertían en intermediarios entre el reino humano y el sobrenatural y eran capaces de comunicarse con los seres supremos, con los muertos, con los demonios, con los espíritus de la naturaleza. Quien ha participado en estas ceremonias con las plantas sacras sabe lo que es un estado de iluminación y ésta se caracteriza especialmente por esos colores vivos que se presentan en esa conciencia visionaria-curativa, la sensibilidad profunda de comprensión y entendimiento de los sentidos, del tiempo y del espacio, del pasado presente y futuro que se convierten
algunas usaban el Peyote, los Hongos alucinógenos el primero en el Centro por San Luis Potosí, el otro en Oaxaca y el sureste Mexicano, pipilzinzintli, te mando estos enlaces ahí encontraras alguna información
http://www.exonline.com.mx/diario/noticia/primera/...
http://www.mind-surf.net/drogas/hongos.htm