En "El banquete" de Platón cada uno de los comensales hace gala de su particular visión de lo que es el amor. Uno de ellos, aclara que el hombre en un principio era un ser íntegro, pero un día los dioses lo separaron y desde ese entonces el hombre vaga por el mundo buscando su mitad. Esa es la historia de la "media naranja"
Equivale a la esposa (o novia) o al esposo (o novio), uno respecto del otro. El origen podría ser el hermoso mito de la aparición de los dos sexos humanos, según lo cuenta Platón, por el que al principio el ser humano era sólo uno, asexuado, que vivía en perfecta armonía. Pero, un día desobedeció a los dioses y éstos lo castigaron separándolo en dos mitades (como a una naranja): hombre y mujer, y los condenó a vagar eternamente buscando la otra mitad para recuperar su completa felicidad.
Muchas veces hemos escuchado las frases "mi alma gemela", o "mi otra mitad".
En Latinoamérica es muy común denominar al cónyuge o novio como "mi media naranja".
Esto refleja la idea que se tiene de la pareja:
Se entiende que una buena pareja es el afortunado encuentro de dos mitades.
Podemos encontrar en todo el mundo el mismo simbolismo asociado, por ejemplo, con las dos mitades de un corazón.
Sin embargo, ninguna de estas imágenes debe producir entusiasmo. Por el contrario, deben producir preocupación.
La peculiar matemática del amor, esa de la media naranja, quiere hacernos creer que para formar una pareja se necesita el encuentro fortuito de dos seres humanos partidos por la mitad.
Es preferible no utilizar esa definición, porque alimenta malentendidos y produce sufrimiento.
Es preferible ver a la pareja como al conjunto de dos individuos que libremente eligen viajar juntos por la vida y que ambos entienden que son dos personas completamente diferentes y únicas, con distintas personalidades, emociones, deseos, propósitos, creencias y pensamientos.
Contradiciendo a la teoría de la naranja, es preferible no estimular la búsqueda de una persona considerada como una mitad suplementaria sino el encuentro de otra persona completa.
Una persona que nos atraiga, conmueva y transporte a una mejor manera de ser nosotros mismos.
No otra mitad, una media naranja, sino tal vez una hermosa e interesante manzana.
Los seres humanos, como las frutas, venimos en diferentes sabores, texturas, tamaños y tipos.
Cuando dos se encuentran y comienzan la infinita tarea de construir una pareja funcional, pronto descubren que no suplen sus necesidades.
Es imposible definir al amor, simplemente hay que expresarlo.
Se expresa mas fácilmente cuando los amantes se conceden mutuamente un espacio en sus corazones, reconociendo la existencia del otro como singular y diferente.
En ese juego sagrado e interactivo aprendemos a compartir afinidades y diferencias, alimentándonos como individuos y como miembros de una pareja.
Una pareja que sufre puede dejar de sufrir, es decir, puede transformarse en una pareja funcional.
Para ello, solamente se necesitan 3 ingredientes: compromiso, dedicación y amor.
Te cuento otra desde el punto de vista amoroso:
En tal sentido tiene su origen en un mito que narra el poeta de comedias griego Aristófanes en la obra de Platón llamada El Banquete?
Contaba Aristófanes que, en un principio, la raza humana era casi perfecta. Los seres eran esféricos como naranjas; tenían dos caras opuestas sobre una misma cabeza, cuatro brazos y cuatro piernas que utilizaban para desplazarse rodando. Estos seres podían ser de tres clases: uno, compuesto de hombre + hombre, otro de mujer + mujer y un tercero (el 'andrógino'), de hombre + mujer.
Su vanidad les llevó a enfrentarse a los dioses creyéndose semejantes a ellos. Zeus los castigó partiéndolos por la mitad con el rayo; y mandó a Hermes que a cada uno le atara la carne sobrante en torno al ombligo. Ya repuestos, los seres andaban tristes buscando siempre a su otra mitad, y si alguna vez llegaban a encontrarse con ella, se enlazaban con sus brazos hasta dejarse morir de inanición.
Zeus, compadecido por la estirpe humana, ordenó a Hermes que les girase la cara hacia el mismo lado donde tenían el sexo: de este modo, cada vez que uno de estos seres encontrara a su otra mitad, de esa unión pudiera obtener placer y si además se trataba de un ser andrógino pudieran tener descendencia.
Desde entonces los seres humanos nos vemos condenados a buscar entre nuestros semejantes a nuestra media naranja con la que unirnos en abrazos que nos hagan más "completos".
Sin embargo, Zeus amenazó con cortarnos de nuevo en dos mitades -para que, así, caminemos dando saltos sobre una sola pierna-, en caso de que la raza humana no aprenda a respetar sus propios límites y a superar su peligrosa arrogancia.
La expresión amorosa "la media naranja" tiene su origen en un mito que narra el poeta de comedias griego Aristófanes en la obra de Platón llamada El Banquete
Contaba Aristófanes que, en un principio, la raza humana era casi perfecta. Los seres eran esféricos como naranjas; tenían dos caras opuestas sobre una misma cabeza, cuatro brazos y cuatro piernas que utilizaban para desplazarse rodando. Estos seres podían ser de tres clases: uno, compuesto de hombre + hombre, otro de mujer + mujer y un tercero (el 'andrógino'), de hombre + mujer.
Su vanidad les llevó a enfrentarse a los dioses creyéndoseZeus y el rayo semejantes a ellos. Zeus los castigó partiéndolos por la mitad con el rayo; y mandó a Hermes que a cada uno le atara la carne sobrante en torno al ombligo. Ya repuestos, los seres andaban tristes buscando siempre a su otra mitad, y si alguna vez llegaban a encontrarse con ella, se enlazaban con sus brazos hasta dejarse morir de inanición. Zeus, compadecido por la estirpe humana, ordenó a Hermes que les girase la cara hacia el mismo lado donde tenían el sexo: de este modo, cada vez que uno de estos seres encontrara a su otra mitad, de esa unión pudiera obtener placer y si además se trataba de un ser andrógino pudieran tener descendencia.
Desde entonces los seres humanos nos vemos condenados a buscar entre nuestros semejantes a nuestra media naranja con la que unirnos en abrazos que nos hagan más "completos". Sin embargo, Zeus amenazó con cortarnos de nuevo en dos mitades -para que, así, caminemos dando saltos sobre una sola pierna-, en caso de que la raza humana no aprenda a respetar sus propios límites y a superar su peligrosa arrogancia.
Media naranja: Equivale a la esposa (o novia) o al esposo (o novio), uno respecto del otro. El origen podría ser el hermoso mito de la aparición de los dos sexos humanos, según lo cuenta Platón, por el que al principio el ser humano era sólo uno, asexuado, que vivía en perfecta armonía. Pero, un día desobedeció a los dioses y éstos lo castigaron separándolo en dos mitades (como a una naranja): hombre y mujer, y los condenó a vagar eternamente buscando la otra mitad para recuperar su completa felicidad.
¿SABÍAS QUE... la expresión amorosa "la media naranja"tiene su origen en un mito que narra el poeta de comedias griego Aristófanes en la obra de Platón llamada El Banquete?
Todo empezo con un cientifico, de origen paraguayo, que meditadando acerca de las relaciones humanas postuló: " En la relacion entre el hombre y la mujer intervienen varios fluidos (si se quiere JUGOS); muchas de las veces ves una mujer/hombre muy buenos por fuera y cuando los conoces son secos, agrios y viejos..... ; Otras veces parecen medios mal trecho y por dentro son muy dulces.......TODO ESTO Me hace reflexionar en que las relaciones entre el hombre y la mujer son como la NARANJA...naranja jugosa como la de ombligo! o seca y agria cual naranja fuera de estacion.....EL HOMBRE Y LA MUJER SON ODS PARTES DE UNA MISMA NARANJA que es separada al nacer y cada uno durante su vida debe volver a unirse.....BUSCAR SU MEDIA NARANJA!"
Está escrito en lo anales babilonios antiguos que lo que Salomón hizo cortar a la mitad fue, no como una mala traducción durante años nos hizo creer que fue un niño, una naranja... Desde ese momento se cree que las naranjas al ser cortadas a la exacta mitad tiende a intentar unirse nuevamente y de ahí se trasladó por simetría a las relaciones humanas.
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cuando las relaciones se volvieron acidas
En "El banquete" de Platón cada uno de los comensales hace gala de su particular visión de lo que es el amor. Uno de ellos, aclara que el hombre en un principio era un ser íntegro, pero un día los dioses lo separaron y desde ese entonces el hombre vaga por el mundo buscando su mitad. Esa es la historia de la "media naranja"
Equivale a la esposa (o novia) o al esposo (o novio), uno respecto del otro. El origen podría ser el hermoso mito de la aparición de los dos sexos humanos, según lo cuenta Platón, por el que al principio el ser humano era sólo uno, asexuado, que vivía en perfecta armonía. Pero, un día desobedeció a los dioses y éstos lo castigaron separándolo en dos mitades (como a una naranja): hombre y mujer, y los condenó a vagar eternamente buscando la otra mitad para recuperar su completa felicidad.
Muchas veces hemos escuchado las frases "mi alma gemela", o "mi otra mitad".
En Latinoamérica es muy común denominar al cónyuge o novio como "mi media naranja".
Esto refleja la idea que se tiene de la pareja:
Se entiende que una buena pareja es el afortunado encuentro de dos mitades.
Podemos encontrar en todo el mundo el mismo simbolismo asociado, por ejemplo, con las dos mitades de un corazón.
Sin embargo, ninguna de estas imágenes debe producir entusiasmo. Por el contrario, deben producir preocupación.
La peculiar matemática del amor, esa de la media naranja, quiere hacernos creer que para formar una pareja se necesita el encuentro fortuito de dos seres humanos partidos por la mitad.
Es preferible no utilizar esa definición, porque alimenta malentendidos y produce sufrimiento.
Es preferible ver a la pareja como al conjunto de dos individuos que libremente eligen viajar juntos por la vida y que ambos entienden que son dos personas completamente diferentes y únicas, con distintas personalidades, emociones, deseos, propósitos, creencias y pensamientos.
Contradiciendo a la teoría de la naranja, es preferible no estimular la búsqueda de una persona considerada como una mitad suplementaria sino el encuentro de otra persona completa.
Una persona que nos atraiga, conmueva y transporte a una mejor manera de ser nosotros mismos.
No otra mitad, una media naranja, sino tal vez una hermosa e interesante manzana.
Los seres humanos, como las frutas, venimos en diferentes sabores, texturas, tamaños y tipos.
Cuando dos se encuentran y comienzan la infinita tarea de construir una pareja funcional, pronto descubren que no suplen sus necesidades.
Es imposible definir al amor, simplemente hay que expresarlo.
Se expresa mas fácilmente cuando los amantes se conceden mutuamente un espacio en sus corazones, reconociendo la existencia del otro como singular y diferente.
En ese juego sagrado e interactivo aprendemos a compartir afinidades y diferencias, alimentándonos como individuos y como miembros de una pareja.
Una pareja que sufre puede dejar de sufrir, es decir, puede transformarse en una pareja funcional.
Para ello, solamente se necesitan 3 ingredientes: compromiso, dedicación y amor.
Te cuento otra desde el punto de vista amoroso:
En tal sentido tiene su origen en un mito que narra el poeta de comedias griego Aristófanes en la obra de Platón llamada El Banquete?
Contaba Aristófanes que, en un principio, la raza humana era casi perfecta. Los seres eran esféricos como naranjas; tenían dos caras opuestas sobre una misma cabeza, cuatro brazos y cuatro piernas que utilizaban para desplazarse rodando. Estos seres podían ser de tres clases: uno, compuesto de hombre + hombre, otro de mujer + mujer y un tercero (el 'andrógino'), de hombre + mujer.
Su vanidad les llevó a enfrentarse a los dioses creyéndose semejantes a ellos. Zeus los castigó partiéndolos por la mitad con el rayo; y mandó a Hermes que a cada uno le atara la carne sobrante en torno al ombligo. Ya repuestos, los seres andaban tristes buscando siempre a su otra mitad, y si alguna vez llegaban a encontrarse con ella, se enlazaban con sus brazos hasta dejarse morir de inanición.
Zeus, compadecido por la estirpe humana, ordenó a Hermes que les girase la cara hacia el mismo lado donde tenían el sexo: de este modo, cada vez que uno de estos seres encontrara a su otra mitad, de esa unión pudiera obtener placer y si además se trataba de un ser andrógino pudieran tener descendencia.
Desde entonces los seres humanos nos vemos condenados a buscar entre nuestros semejantes a nuestra media naranja con la que unirnos en abrazos que nos hagan más "completos".
Sin embargo, Zeus amenazó con cortarnos de nuevo en dos mitades -para que, así, caminemos dando saltos sobre una sola pierna-, en caso de que la raza humana no aprenda a respetar sus propios límites y a superar su peligrosa arrogancia.
por la dulzura de sus jugos.. y por la falta de algo cuando ya no está la otra mitad
Investiga en El banquete de Platon, ademas encontraras un poco de historia de lo que es el amor platonico tambien!!
La expresión amorosa "la media naranja" tiene su origen en un mito que narra el poeta de comedias griego Aristófanes en la obra de Platón llamada El Banquete
Contaba Aristófanes que, en un principio, la raza humana era casi perfecta. Los seres eran esféricos como naranjas; tenían dos caras opuestas sobre una misma cabeza, cuatro brazos y cuatro piernas que utilizaban para desplazarse rodando. Estos seres podían ser de tres clases: uno, compuesto de hombre + hombre, otro de mujer + mujer y un tercero (el 'andrógino'), de hombre + mujer.
Su vanidad les llevó a enfrentarse a los dioses creyéndoseZeus y el rayo semejantes a ellos. Zeus los castigó partiéndolos por la mitad con el rayo; y mandó a Hermes que a cada uno le atara la carne sobrante en torno al ombligo. Ya repuestos, los seres andaban tristes buscando siempre a su otra mitad, y si alguna vez llegaban a encontrarse con ella, se enlazaban con sus brazos hasta dejarse morir de inanición. Zeus, compadecido por la estirpe humana, ordenó a Hermes que les girase la cara hacia el mismo lado donde tenían el sexo: de este modo, cada vez que uno de estos seres encontrara a su otra mitad, de esa unión pudiera obtener placer y si además se trataba de un ser andrógino pudieran tener descendencia.
Desde entonces los seres humanos nos vemos condenados a buscar entre nuestros semejantes a nuestra media naranja con la que unirnos en abrazos que nos hagan más "completos". Sin embargo, Zeus amenazó con cortarnos de nuevo en dos mitades -para que, así, caminemos dando saltos sobre una sola pierna-, en caso de que la raza humana no aprenda a respetar sus propios límites y a superar su peligrosa arrogancia.
Sobre el origen de la expresión:
Una versión (http://www.deciudadreal.org/varios/dichos/m.php):
Media naranja: Equivale a la esposa (o novia) o al esposo (o novio), uno respecto del otro. El origen podría ser el hermoso mito de la aparición de los dos sexos humanos, según lo cuenta Platón, por el que al principio el ser humano era sólo uno, asexuado, que vivía en perfecta armonía. Pero, un día desobedeció a los dioses y éstos lo castigaron separándolo en dos mitades (como a una naranja): hombre y mujer, y los condenó a vagar eternamente buscando la otra mitad para recuperar su completa felicidad.
Una variante o ampliación de la anterior versión (http://iris.cnice.mecd.es/latingriego/Palladium/0_...
La "media naranja"
¿SABÍAS QUE... la expresión amorosa "la media naranja"tiene su origen en un mito que narra el poeta de comedias griego Aristófanes en la obra de Platón llamada El Banquete?
Todo empezo con un cientifico, de origen paraguayo, que meditadando acerca de las relaciones humanas postuló: " En la relacion entre el hombre y la mujer intervienen varios fluidos (si se quiere JUGOS); muchas de las veces ves una mujer/hombre muy buenos por fuera y cuando los conoces son secos, agrios y viejos..... ; Otras veces parecen medios mal trecho y por dentro son muy dulces.......TODO ESTO Me hace reflexionar en que las relaciones entre el hombre y la mujer son como la NARANJA...naranja jugosa como la de ombligo! o seca y agria cual naranja fuera de estacion.....EL HOMBRE Y LA MUJER SON ODS PARTES DE UNA MISMA NARANJA que es separada al nacer y cada uno durante su vida debe volver a unirse.....BUSCAR SU MEDIA NARANJA!"
Está escrito en lo anales babilonios antiguos que lo que Salomón hizo cortar a la mitad fue, no como una mala traducción durante años nos hizo creer que fue un niño, una naranja... Desde ese momento se cree que las naranjas al ser cortadas a la exacta mitad tiende a intentar unirse nuevamente y de ahí se trasladó por simetría a las relaciones humanas.