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Estoy en contra de las reglas religiosas. Están hechas para beneficio de unos pocos. La prueba está en cómo está la humanidad .

Tengo total confianza en mi criterio. No sufro de ninguna patología que me haga creer en lo que no es real. No me identifico con los que hacen las actuales reglas porque como dije antes. Es cuestión de tener un poquito de inteligencia y respeto por el prójimo para darse cuenta.

Hola! mira yo en lo personal confio en mi propio criterio, las reglas ayudan pero creo que soy lo suficientemente capaz de actuar bien`por mi misma, porque como adulto, se distinguir entre lo bueno y lo malo. Y asì en conclusiòn resolver por mi misma, que me conviene actuar bien.

Tengo una base sólida en lo que respecta a la moral, aprendida desde muy pequeña.

Si mi mundo no tuviera leyes, podría seguir tal cual como estoy ahora. Es un hábito.

Confío en mi criterio y poco en las reglas que se me puedan imponer. Suelo hacer las cosas a mí manera.

A fin de cuentas.. el seguir reglas es gracias a tu criterio... ¿seguirías una regla que no estés de acuerdo en seguir? si tu respuesta es sí, no contester por favor!!! si tu respuesta es no, gracias por contestar.. pasaste la prueba

la tengo completamente

soy antiteista.

en lo personal... es mi criterio, no necesito de las reglas, me siento bien haciendo las cosas correctamente, lo disfruto, no lo veo como una imposicion u obligacion, creo que esa siempre fue una ventaja...

Tengo confianza en mi criterio.

Cuando no sé que hacer averiguo que dice la ley, por ejemplo: No sabía qué cantidad de dinero era la adecuada para dar como aguinaldo a una persona que llevaba casi un año trabajando en mi casa, así que revisé lo que dice la ley, son dos semanas de sueldo, así que eso fue lo que le di, y se quedó muy conforme.

No, ya sé que cada ser humano viene dotado de lo necesario, no sólo para descubrir a Dios sino para hacer de su vida una moralmente sana.

Por un lado, hemos sido dotados de inteligencia, voluntad y capacidad de amar además de libertad para ejercitarlas; luego, se nos ha dado la Ley Natural que es la que nos guía en el discernimiento del bien y del mal, la conservación de la vida, la crianza y educación de la prole, la sexualidad, etc.

Con este equipamiento y habiendo procurado una conciencia clara y formada cualquier ser humano está en capacidad de: uno, hallar a Dios; dos, de elegir lo que considera conveniente.

Si no halla a Dios o Dios no le interesa, sigue teniendo la capacidad de elegir para sí mismo criterios semejantes o totalmente opuestos a los divinos, pero criterios al fin.

Después de haber vivido toda mi vida bajo la dirección de mis propios criterios me di cuenta que no me satisfacían así que indagué para saber de qué se trataban los criterios divinos y resultaron ser no sólo razonables sino que me fijaban una meta más alta que la que yo misma me podía proveer, por decirlo así, la Totús que yo soñaba era inferior a la que Dios soñó para ella, así que fundí mi criterio con el de Dios y aquí estoy, viviendo lo más coherentemente que puedo esta adhesión.

Fue una adhesión libre y razonada que hice después de comprobar por mucho tiempo que mis propios criterios no me satisfacían.

Continuo siendo libre, tanto que aún me permito ir en contra de los criterios de Dios y guiarme por los míos, que -cosa rara- siempre e inevitablemente me conducen a toparme con la pared y a tener que reemprender el camino; sólo cuando parto con Dios como guía y meta consigo ver el horizonte despejado.

Totús

ahh comfianza eso es lo que necesito por que ahora estoy un poco triste

me siento solo