Hoy en el mundo cristiano hay mucha confusión al respecto, muchos aún no alcanzan a ver el verdadero significado del templo, y son confundidos por falsas enseñanzas respecto al verdadero templo de Dios.
En primer lugar me gustaría destacar lo que la Biblia dice al respecto, creo que es fundamental considerar la opinión de Dios al respecto; ya que es El quien tiene la última palabra; de cual es el lugar de su habitación y donde ha escogido habitar.
(Hechos 7:48-50) Aunque el Dios altísimo no vive en templos hechos por la mano de los hombres. Como dijo el profeta: ‘El cielo es mi trono, y la tierra es el estrado de mis pies. ¿Qué clase de casa me construirán?, dice el Señor; ¿cuál será mi lugar de descanso, si yo mismo hice todas estas cosas?
En la Biblia, el tema es muy claro; Dios no habita en construcciones humanas; si El lo dice ¿Por qué insistimos e insistimos en construir templos y declarar que son lugares santos habitados por Dios? Por lo menos el Dios que da testimonio la Biblia, no habita en esos lugares. No hay ningún sólo ejemplo en el nuevo testamento, en que los cristianos hayan construido algún templo en toda la Biblia. El único templo que se construyó en Israel, fue hecho como una figura o semejanza al modelo que Dios le mostró a su pueblo, para aquel templo que había de venir.
En mi opinión me parece que cualquier construcción que tenga el titulo de templo hoy en día, y en el cual se diga que Dios lo habita; me parece un acto de ignorancia.
Ignorancia ya que Dios no habita ese lugar (ni ninguna casa hecha por mano de hombre) y por lo tanto, no es un templo del Dios vivo. Y si no es ignorancia la razón de su construcción, la única alternativa que queda, es que sea un engaño premeditado para atrapar a las personas en idolatría; o por última alternativa, si no es por la razones anteriores su denominación de templo, es que realmente en ese lugar habitan espíritus, pero en ningún caso el Espíritu de Dios, el creador del universo; serán otros tipos de espíritus extraños sus habitantes, ya que Dios declaró que el no habita en dichos lugares.
En el antiguo testamento se nos enseña que Dios tuvo su presencia en el templo de Salomón, templo que era figura y sombra del verdadero que iba a venir, pero esto hasta que se cumplió la promesa de Dios en el nuevo pacto; la pregunta que nos debemos contestar es la siguiente: ¿Y cual es este verdadero templo que debemos conocer? Seria muy bueno saberlo para todo hombre sincero que quiera acercarse a la presencia de Dios pueda hacerlo por ese medio, es decir, visitar el verdadero templo de Dios.
Veamos lo que nos enseña Jesús respecto al verdadero templo de Dios:
(Juan 2:19-22) Jesús les contestó:
–Destruyan este templo, y en tres días volveré a levantarlo. Los judíos le dijeron:
–Cuarenta y seis años se ha trabajado en la construcción de este templo, ¿y tú en tres días lo vas a levantar? Pero el templo al que Jesús se refería era su propio cuerpo. Por eso, cuando resucitó, sus discípulos se acordaron de esto que había dicho, y creyeron en la Escritura y en las palabras de Jesús.
El verdadero templo de Dios es Jesús mismo, el Hijo de Dios (como él lo declara); y cualquiera que quiera acercarse a Dios, debe hacerlo en ese templo y no en uno construido por manos de hombre, en los cuales Dios no habita. Nadie puede adorar verdaderamente a Dios, si no está en el verdadero templo; y el verdadero templo es Jesucristo; de modo que en Cristo podemos verdaderamente adorar a Dios y estar ante su presencia. He ahí el verdadero templo del nuevo pacto; Jesucristo el Hijo del Padre. Ya no es necesario construir un templo
(como el de Israel en el antiguo pacto); sino que el verdadero templo ya ha sido levantado, y no por mano humana; sino por mano divina; es Cristo resucitado de los muertos. Sólo en él, entramos en la presencia de Dios.
Que no te engañen, ya Dios no habita en construcciones hechas por los hombres; eso fue en el antiguo pacto, con su pueblo Israel; pero hoy él habita en el verdadero templo, que es Jesucristo y su iglesia.
Mira, sí, desde tu santa morada, los cielos, y bendice a tu pueblo Israel y al suelo que nos has dado, tal como juraste a nuestros antepasados, la tierra que mana leche y miel’.Deuter. 26:15
Y tienes que escuchar la petición de favor por parte de tu siervo y de tu pueblo Israel con que oren hacia este lugar; y dígnate oír tú mismo en el lugar de tu morada, en los cielos, y tienes que oír y perdonar.1 Rey 8:30
NOTA.-Me desagrada este nuevo formato que carece de corrección de ortografía y ya no existe mi listado de Preguntas de Chistes pendientes para calificar las mejores respuestas
Dios habita en el tercer cielo, lee éstos versículos:
"Escucha tú desde el cielo, desde el lugar donde habitas...." (1 Reyes 8:43 DHH).
“Padre nuestro que estás en los cielos...” (Mateo 6:9 DHH).
"Porque Cristo no entró en aquel santuario hecho por los hombres, que era solamente una figura del santuario verdadero, sino que entró en el cielo mismo, donde ahora se presenta delante de Dios para rogar en nuestro favor." (Heb. 9:24 DHH)
"El Señor, el que reina en el cielo, se ríe de ellos." (Salmo 2:4 DHH)
"Del mismo modo, procuren ustedes que su luz brille delante de la gente, para que, viendo el bien que ustedes hacen, todos alaben a su Padre que está en el cielo." (Mt 5:16 DHH)
"Tengan en cuenta que del Señor su Dios son los cielos y lo más alto de los cielos, la tierra y todo lo que hay en ella." (Dt. 10:14 DHH)
El reino de Dios está en vosotros." (Lucas 17, 21)
"¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíritu de Dios mora en vosotros?"
(1 Corintios 3, 16)
"Dios es amor; y el que permanece en amor, permanece en Dios, y Dios en él."
(1 era de Juan 4, 16 b)
Y el apóstol Esteban advierte: "El Altísimo no habita en templos hechos a mano, como dice el profeta (Isaías 66, 1 -2): ´El cielo es mi trono, Y la tierra el estrado de mis pies. ¿Qué casa me edificaréis?` dice el Señor; ¿O cuál es el lugar de mi reposo? ¿No hizo mi mano todas estas cosas? ¡Duros de cerviz, e incircuncisos de corazón y de oídos! Vosotros resistís siempre al Espíritu Santo; como vuestros padres, así también vosotros" (Hechos 7, 48-51). Inmediatamente después de estas palabras, los sacerdotes lo hicieron matar.
Estos "padres" de los sacerdotes, de los cuales habló Esteban, hicieron construir dos veces un templo de maderas nobles y piedras e inventaron un culto cruel con el sacrificio de miles de animales inocentes. Aparentemente, el rey David, hijo de Salomón, habría recibido de "Dios" el encargo, para la construcción del primer templo. ¿Pero de que dios?
El propio David quiso construir el mismo una casa como estas. Pero un profeta intervino, y en el 2º libro de Samuel dice: "Aconteció aquella noche, que vino palabra de Jehová a Natán, diciendo: ´Ve y di a mi siervo David: Así ha dicho Jehová: ´¿Tú me has de edificar casa en que yo more? Ciertamente no he habitado en casas desde el día en que saqué a los hijos de Israel de Egipto hasta hoy, sino que he andado en tienda y en tabernáculo. Y en todo cuanto he andado con todos los hijos de Israel, ¿he hablado yo palabra a alguna de las tribus de Israel, a quien haya mandado apacentar a mi pueblo de Israel, diciendo: ¿Por qué no me habéis edificado casa de cedro?``" (2ª Samuel 7, 5-7)
Y por un profeta a David también le fue comunicado la siguiente palabra de Dios: "Asimismo Jehová te hace saber que él te hará casa" (Versículo 11 b). El propio David iba a ser un digno "templo de Dios", en cuyo corazón puede vivir Dios.
Toda refentecia bíblica que hable de sitios o lugares físicos serán solamente alegorías, porque está claro que Dios siendo espíritu no habita en ningún lado, porque habitar es "vivir" o tener habitación o una casa... y eso no tiene sentido para Dios que se espíritu..
Gracias, Pablo, porque nos alegramos de saber que el lugar santo en el cual entró el resucitado Jesucristo con el valor de su propia sangre de sacrificio no fue un lugar santo en la Tierra donde estuvieran entonces sus pocos discípulos, sino que era “el cielo mismo,” donde está la “persona de Dios,” donde Dios mismo mora personalmente más bien que morar allí por espíritu. No obstante, ese verdadero “lugar santo,” a saber, “el cielo mismo,” no era todo lo que componía el templo verdadero. ¿Por qué no? Porque el Santísimo de la tienda terrestre y de los templos terrestres hechos con manos y donde Dios moraba por su espíritu no era todo lo que componía aquellas estructuras sagradas.
Answers & Comments
Verified answer
Hoy en el mundo cristiano hay mucha confusión al respecto, muchos aún no alcanzan a ver el verdadero significado del templo, y son confundidos por falsas enseñanzas respecto al verdadero templo de Dios.
En primer lugar me gustaría destacar lo que la Biblia dice al respecto, creo que es fundamental considerar la opinión de Dios al respecto; ya que es El quien tiene la última palabra; de cual es el lugar de su habitación y donde ha escogido habitar.
(Hechos 7:48-50) Aunque el Dios altísimo no vive en templos hechos por la mano de los hombres. Como dijo el profeta: ‘El cielo es mi trono, y la tierra es el estrado de mis pies. ¿Qué clase de casa me construirán?, dice el Señor; ¿cuál será mi lugar de descanso, si yo mismo hice todas estas cosas?
En la Biblia, el tema es muy claro; Dios no habita en construcciones humanas; si El lo dice ¿Por qué insistimos e insistimos en construir templos y declarar que son lugares santos habitados por Dios? Por lo menos el Dios que da testimonio la Biblia, no habita en esos lugares. No hay ningún sólo ejemplo en el nuevo testamento, en que los cristianos hayan construido algún templo en toda la Biblia. El único templo que se construyó en Israel, fue hecho como una figura o semejanza al modelo que Dios le mostró a su pueblo, para aquel templo que había de venir.
En mi opinión me parece que cualquier construcción que tenga el titulo de templo hoy en día, y en el cual se diga que Dios lo habita; me parece un acto de ignorancia.
Ignorancia ya que Dios no habita ese lugar (ni ninguna casa hecha por mano de hombre) y por lo tanto, no es un templo del Dios vivo. Y si no es ignorancia la razón de su construcción, la única alternativa que queda, es que sea un engaño premeditado para atrapar a las personas en idolatría; o por última alternativa, si no es por la razones anteriores su denominación de templo, es que realmente en ese lugar habitan espíritus, pero en ningún caso el Espíritu de Dios, el creador del universo; serán otros tipos de espíritus extraños sus habitantes, ya que Dios declaró que el no habita en dichos lugares.
En el antiguo testamento se nos enseña que Dios tuvo su presencia en el templo de Salomón, templo que era figura y sombra del verdadero que iba a venir, pero esto hasta que se cumplió la promesa de Dios en el nuevo pacto; la pregunta que nos debemos contestar es la siguiente: ¿Y cual es este verdadero templo que debemos conocer? Seria muy bueno saberlo para todo hombre sincero que quiera acercarse a la presencia de Dios pueda hacerlo por ese medio, es decir, visitar el verdadero templo de Dios.
Veamos lo que nos enseña Jesús respecto al verdadero templo de Dios:
(Juan 2:19-22) Jesús les contestó:
–Destruyan este templo, y en tres días volveré a levantarlo. Los judíos le dijeron:
–Cuarenta y seis años se ha trabajado en la construcción de este templo, ¿y tú en tres días lo vas a levantar? Pero el templo al que Jesús se refería era su propio cuerpo. Por eso, cuando resucitó, sus discípulos se acordaron de esto que había dicho, y creyeron en la Escritura y en las palabras de Jesús.
El verdadero templo de Dios es Jesús mismo, el Hijo de Dios (como él lo declara); y cualquiera que quiera acercarse a Dios, debe hacerlo en ese templo y no en uno construido por manos de hombre, en los cuales Dios no habita. Nadie puede adorar verdaderamente a Dios, si no está en el verdadero templo; y el verdadero templo es Jesucristo; de modo que en Cristo podemos verdaderamente adorar a Dios y estar ante su presencia. He ahí el verdadero templo del nuevo pacto; Jesucristo el Hijo del Padre. Ya no es necesario construir un templo
(como el de Israel en el antiguo pacto); sino que el verdadero templo ya ha sido levantado, y no por mano humana; sino por mano divina; es Cristo resucitado de los muertos. Sólo en él, entramos en la presencia de Dios.
Que no te engañen, ya Dios no habita en construcciones hechas por los hombres; eso fue en el antiguo pacto, con su pueblo Israel; pero hoy él habita en el verdadero templo, que es Jesucristo y su iglesia.
Saludos.
Mira, sí, desde tu santa morada, los cielos, y bendice a tu pueblo Israel y al suelo que nos has dado, tal como juraste a nuestros antepasados, la tierra que mana leche y miel’.Deuter. 26:15
Y tienes que escuchar la petición de favor por parte de tu siervo y de tu pueblo Israel con que oren hacia este lugar; y dígnate oír tú mismo en el lugar de tu morada, en los cielos, y tienes que oír y perdonar.1 Rey 8:30
Hola,
JUAN 14,
2 En la Casa de mi Padre hay muchas habitaciones;
si no fuera así, se lo habría dicho a ustedes.
Yo voy a prepararles un lugar.
Se entiende que la casa de Dios Padre ES EL CIELO
Saludos
.
NOTA.-Me desagrada este nuevo formato que carece de corrección de ortografía y ya no existe mi listado de Preguntas de Chistes pendientes para calificar las mejores respuestas
Dios habita en el tercer cielo, lee éstos versículos:
"Escucha tú desde el cielo, desde el lugar donde habitas...." (1 Reyes 8:43 DHH).
“Padre nuestro que estás en los cielos...” (Mateo 6:9 DHH).
"Porque Cristo no entró en aquel santuario hecho por los hombres, que era solamente una figura del santuario verdadero, sino que entró en el cielo mismo, donde ahora se presenta delante de Dios para rogar en nuestro favor." (Heb. 9:24 DHH)
"El Señor, el que reina en el cielo, se ríe de ellos." (Salmo 2:4 DHH)
"Del mismo modo, procuren ustedes que su luz brille delante de la gente, para que, viendo el bien que ustedes hacen, todos alaben a su Padre que está en el cielo." (Mt 5:16 DHH)
"Tengan en cuenta que del Señor su Dios son los cielos y lo más alto de los cielos, la tierra y todo lo que hay en ella." (Dt. 10:14 DHH)
El reino de Dios está en vosotros." (Lucas 17, 21)
"¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíritu de Dios mora en vosotros?"
(1 Corintios 3, 16)
"Dios es amor; y el que permanece en amor, permanece en Dios, y Dios en él."
(1 era de Juan 4, 16 b)
Y el apóstol Esteban advierte: "El Altísimo no habita en templos hechos a mano, como dice el profeta (Isaías 66, 1 -2): ´El cielo es mi trono, Y la tierra el estrado de mis pies. ¿Qué casa me edificaréis?` dice el Señor; ¿O cuál es el lugar de mi reposo? ¿No hizo mi mano todas estas cosas? ¡Duros de cerviz, e incircuncisos de corazón y de oídos! Vosotros resistís siempre al Espíritu Santo; como vuestros padres, así también vosotros" (Hechos 7, 48-51). Inmediatamente después de estas palabras, los sacerdotes lo hicieron matar.
Estos "padres" de los sacerdotes, de los cuales habló Esteban, hicieron construir dos veces un templo de maderas nobles y piedras e inventaron un culto cruel con el sacrificio de miles de animales inocentes. Aparentemente, el rey David, hijo de Salomón, habría recibido de "Dios" el encargo, para la construcción del primer templo. ¿Pero de que dios?
El propio David quiso construir el mismo una casa como estas. Pero un profeta intervino, y en el 2º libro de Samuel dice: "Aconteció aquella noche, que vino palabra de Jehová a Natán, diciendo: ´Ve y di a mi siervo David: Así ha dicho Jehová: ´¿Tú me has de edificar casa en que yo more? Ciertamente no he habitado en casas desde el día en que saqué a los hijos de Israel de Egipto hasta hoy, sino que he andado en tienda y en tabernáculo. Y en todo cuanto he andado con todos los hijos de Israel, ¿he hablado yo palabra a alguna de las tribus de Israel, a quien haya mandado apacentar a mi pueblo de Israel, diciendo: ¿Por qué no me habéis edificado casa de cedro?``" (2ª Samuel 7, 5-7)
Y por un profeta a David también le fue comunicado la siguiente palabra de Dios: "Asimismo Jehová te hace saber que él te hará casa" (Versículo 11 b). El propio David iba a ser un digno "templo de Dios", en cuyo corazón puede vivir Dios.
-_
@@@@@@@@@@@@@@@@@@@@
Toda refentecia bíblica que hable de sitios o lugares físicos serán solamente alegorías, porque está claro que Dios siendo espíritu no habita en ningún lado, porque habitar es "vivir" o tener habitación o una casa... y eso no tiene sentido para Dios que se espíritu..
ADios..
todos buscan fuera lo que tienen dentro, Dios esta dentro de nosotros en nuestro corazon, en nuestra alma...
Gracias, Pablo, porque nos alegramos de saber que el lugar santo en el cual entró el resucitado Jesucristo con el valor de su propia sangre de sacrificio no fue un lugar santo en la Tierra donde estuvieran entonces sus pocos discípulos, sino que era “el cielo mismo,” donde está la “persona de Dios,” donde Dios mismo mora personalmente más bien que morar allí por espíritu. No obstante, ese verdadero “lugar santo,” a saber, “el cielo mismo,” no era todo lo que componía el templo verdadero. ¿Por qué no? Porque el Santísimo de la tienda terrestre y de los templos terrestres hechos con manos y donde Dios moraba por su espíritu no era todo lo que componía aquellas estructuras sagradas.
en su trono . perono el que imaginamos , nosotros , ya que dios no es humano,
es luz sobre luz , no la luz de la que tenemos conocimiento,
suerte,,
Salmos