Don Tomás Arias Marín de Cubas, en su obra «Historia de la Conquista de las siete Yslas Canaria» (1694), cuenta que, en los tiempos en los que la Corona de Castilla ultimaba la conquista de Gran Canaria, los aborígenes eran guiados por Tazarte, el viejo Faycán de Telde, y el joven Bentejuí. Las batallas se sucedían y, saltando de risco en risco, fueron esquivando la persecución del ejército castellano hasta que acabaron refugiándose en el monte sagrado de Ansite, donde fueron sitiados por el ejército castellano.
Loa aborígenes fueron rindiéndose hasta que, en lo alto del roque, tan sólo quedaban dos hombres que se negaban a entregarse: Tazarte y Bentejuí.
La leyenda cuenta que se lanzaron al vacío al grito de Atis Tirma (Atis -o Axit -, significa “viva”, y Tirma -o Dirma-, “montaña sagrada”), encomendándose así a la montaña sagrada, desde la que saltaron, para poder viajar al otro mundo: el de los espíritus.
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montaña sagrada ...
Don Tomás Arias Marín de Cubas, en su obra «Historia de la Conquista de las siete Yslas Canaria» (1694), cuenta que, en los tiempos en los que la Corona de Castilla ultimaba la conquista de Gran Canaria, los aborígenes eran guiados por Tazarte, el viejo Faycán de Telde, y el joven Bentejuí. Las batallas se sucedían y, saltando de risco en risco, fueron esquivando la persecución del ejército castellano hasta que acabaron refugiándose en el monte sagrado de Ansite, donde fueron sitiados por el ejército castellano.
Loa aborígenes fueron rindiéndose hasta que, en lo alto del roque, tan sólo quedaban dos hombres que se negaban a entregarse: Tazarte y Bentejuí.
La leyenda cuenta que se lanzaron al vacío al grito de Atis Tirma (Atis -o Axit -, significa “viva”, y Tirma -o Dirma-, “montaña sagrada”), encomendándose así a la montaña sagrada, desde la que saltaron, para poder viajar al otro mundo: el de los espíritus.
ESPERO QUE TE SIRVA, exito :)
Hola!
La frase “Atis Tirma” es un grito que pronunciaban los aborÃgenes canarios en la época de la conquista, cuando perseguidos por sus captores y por no vivir sometidos por nadie, se arrojaban desde los altos de los barrancos. Este grito da forma y representa el honor y los valores que poseÃa esta raza, cuyo significado es “Por ti, Tierra”, dando con ello a entender el apego que se tenia a la tierra en la que se vivÃa. Esto asombro tanto a los conquistadores que sus escribanos hicieron constancia de ello, llegando de esta manera el conocimiento de aquellos hechos hasta nuestros dÃas.