Ola, io no soi religiosa ni nada d eso, pero si creo en Dios, por q a lo largo d mi vida han pasado cosas q me hacen pensar q ese ser supremo sta conmigo, no son milagros ni nada d esas cosas, simplemente cosas lindas q he disfrutado i vivido con musha felicidad i fe, saluditos!
Alguna vez puedes sentir paz y gozo en la oración y otras desasosiego y ni lo primero quiere decir que la oración sea la adecuada ni lo segundo que no lo sea.
Dios es siempre MAS. Quedarse en lo que ves, en lo que sientes, en lo que oyes, en lo que piensas... sea positivo o negativo, es querer atraparlo y en cierto modo "domesticarlo" para que no te interpele.
¿La amistad se basa en lo que "sientes"? ¿Amarás a tu pareja, le serás fiel sólo si "sientes" eso? Para mí el amor es más.
Y Dios, para mí es AMOR.
Y respecto a las hadas... Bien, puedes sentirlas tú. Por ello no voy a creer en ellas como no creo que tú creas en Dios por mi experiencia personal. La cuestión es que mi vida cambió y es la que es porque Dios me transformó (Jesús dice que por sus frutos los conoceréis). Esa es la "prueba": si soy comprensiva, si estoy dispuesta a perdonar y hacer el bien indiscriminadamente, si no critico ni calumnio... y un largo etc. Esta es mi "prueba", pero no necesito probar nada.
Tú cree lo que quieras creer y yo también. Y ya está.
Yo creo que cada quien es libre de pensar lo que quiera, cada cabeza es un mundo y mientras no se dañen a otras personas (como los fanáticos musulmanes) pues creo que no pasa nada.
Gracias a dios (jajaja) somos libres en éste pais para hacer y creen en lo que queramos.
PD: NO creo en dios pero ni tantito, y también creo que hay que respetar a los que si creen.
Desde el momento que el hombre abre sus ojos a este mundo, un gran orden lo rodea. Necesitamos oxígeno para sobrevivir; es interesante que la atmósfera del planeta en que vivimos proporcione más de la cantidad necesaria de oxígeno. De esta manera, todos respiramos sin dificultades. Para la existencia de la vida en este planeta, la presencia de una fuente de calor es esencial. Como respuesta a esta necesidad, el sol está ubicado justo a la distancia correcta para emitir la cantidad exacta de calor y energía que se necesitan para el mantenimiento de la vida. La nutrición es otra de las necesidades que el hombre debe satisfacer para sobrevivir; cada rincón del mundo es abundante en comestibles increíblemente diversificados. Igualmente, el agua es una necesidad del hombre; sorprendentemente, tres cuartas partes del planeta están cubiertas de agua. El hombre además requiere resguardo de los elementos; en este mundo, hay todas las clases de materiales útiles para construir refugios.
Éstos son sólo algunos de los miles de detalles que hacen posible nuestra vida en la Tierra. De hecho, el hombre vive en un planeta perfectamente diseñado para su supervivencia. Éste es ciertamente un planeta “creado para los seres humanos”,
La interpretación a la que cada persona arriba sobre un asunto, suele ser consecuencia de los “métodos adquiridos de pensamiento”. Es decir, se piensa de la manera que se ha aprendido, o de la manera en que ha sido adoctrinado. Con este método se suele arribar a conclusiones erradas. Sin embargo, si se logran dejar de lado los prejuicios, y se realiza un razonamiento crítico de las condiciones de nuestra existencia y cómo esta es posible, se saldrá ciertamente de los límites del pensamiento trivial y se comenzará a reflexionar y a cuestionar:
¿Cómo la atmósfera sirve como un techo protector para la tierra?
¿Cómo cada una de los billones de células en el cuerpo humano se organizan y realizan sus tareas individuales?
¿Cómo este equilibrio ecológico extraordinario existe en la tierra?
Una persona que busca respuestas a estas preguntas ciertamente procede de la manera correcta. No permanece insensible a las cosas que suceden a su alrededor, y no se conforma con la ignorancia sobre la extraordinaria naturaleza del mundo. Una persona que se hace preguntas, que reflexiona sobre ellas y que da respuestas a las mismas, comprenderá que, cada centímetro del planeta, está dominado por un perfecto plan y un perfecto orden.
¿Cómo es que llegó a existir este perfecto orden en el universo?
¿Quién estableció los equilibrios tan delicados que observamos en el mundo?
¿Cómo hicieron los seres vivos, increíblemente diversificados en la naturaleza, para surgir?
El mantenerse ocupado con una investigación implacable para poder contestar estas preguntas, da como resultado un claro conocimiento de que todo en el universo, su orden, cada ser viviente y cada estructura es componente de un plan, el producto de un diseño. Cada detalle lo es: la estructura excelente del ala de un insecto, el sistema que permite a un árbol llevar litros de agua a sus más altas ramas, el orden de los planetas, y la proporción de gases en la atmósfera; todos son ejemplos únicos de perfección.
En cada detalle del mundo, que es infinitamente variado, encontrará el hombre rastros de su Creador. Dios, el dueño del universo entero, se da a conocer al hombre a través del perfecto diseño de Su creación. Todo lo que nos rodea, los pájaros en el vuelo, nuestros corazones palpitando, el nacimiento de un niño o la existencia del Sol manifiestan el poder de Dios y Su creación. Y lo que el hombre debe hacer, es comprender esta realidad.
Estos propósitos deben su existencia al hecho de que todo ha sido creado. Una persona inteligente se da cuenta que la planificación, el diseño y la sabiduría están presentes en cada detalle del universo; y esto la lleva al reconocimiento del Creador.
Todos los seres vivientes, y también las cosas inanimadas, evidencian la existencia y la grandeza de Dios, basta con mirar a nuestro alrededor para darnos cuenta de esto. Debemos esforzarnos de la mejor manera por demostrar nuestro aprecio por la grandeza eterna de Dios. La existencia de Dios es obvia, e ignorarlo sería sólo el principio del más grande daño que podríamos hacernos a nosotros mismos. Porque Dios no padece ninguna necesidad. Él es el Único que muestra Su grandeza en todas las cosas y de todas las maneras posibles.
Dios es el dueño de todo, de los cielos y la Tierra.
Si creo en Dios porque esa es mi fe. Aunque no lo vea yo se que esta a mi lado. El me creo. Las hadas...no creo aunque me digas que las sientes. Cada persona cree en distintas cosas o personas. Yo creo en DIOS....
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Yo creo en mí , ahora si hay un Dios dentro mío, ya no lo sé... ¬¬
Y de seguro las sientes, no lo dudo pero las hadas no murieron para salvarnos
Ola, io no soi religiosa ni nada d eso, pero si creo en Dios, por q a lo largo d mi vida han pasado cosas q me hacen pensar q ese ser supremo sta conmigo, no son milagros ni nada d esas cosas, simplemente cosas lindas q he disfrutado i vivido con musha felicidad i fe, saluditos!
NO, no creo en Dios por sentirlo. Sería absurdo.
Alguna vez puedes sentir paz y gozo en la oración y otras desasosiego y ni lo primero quiere decir que la oración sea la adecuada ni lo segundo que no lo sea.
Dios es siempre MAS. Quedarse en lo que ves, en lo que sientes, en lo que oyes, en lo que piensas... sea positivo o negativo, es querer atraparlo y en cierto modo "domesticarlo" para que no te interpele.
¿La amistad se basa en lo que "sientes"? ¿Amarás a tu pareja, le serás fiel sólo si "sientes" eso? Para mí el amor es más.
Y Dios, para mí es AMOR.
Y respecto a las hadas... Bien, puedes sentirlas tú. Por ello no voy a creer en ellas como no creo que tú creas en Dios por mi experiencia personal. La cuestión es que mi vida cambió y es la que es porque Dios me transformó (Jesús dice que por sus frutos los conoceréis). Esa es la "prueba": si soy comprensiva, si estoy dispuesta a perdonar y hacer el bien indiscriminadamente, si no critico ni calumnio... y un largo etc. Esta es mi "prueba", pero no necesito probar nada.
Tú cree lo que quieras creer y yo también. Y ya está.
Un abrazo.
Yo creo que cada quien es libre de pensar lo que quiera, cada cabeza es un mundo y mientras no se dañen a otras personas (como los fanáticos musulmanes) pues creo que no pasa nada.
Gracias a dios (jajaja) somos libres en éste pais para hacer y creen en lo que queramos.
PD: NO creo en dios pero ni tantito, y también creo que hay que respetar a los que si creen.
Desde el momento que el hombre abre sus ojos a este mundo, un gran orden lo rodea. Necesitamos oxígeno para sobrevivir; es interesante que la atmósfera del planeta en que vivimos proporcione más de la cantidad necesaria de oxígeno. De esta manera, todos respiramos sin dificultades. Para la existencia de la vida en este planeta, la presencia de una fuente de calor es esencial. Como respuesta a esta necesidad, el sol está ubicado justo a la distancia correcta para emitir la cantidad exacta de calor y energía que se necesitan para el mantenimiento de la vida. La nutrición es otra de las necesidades que el hombre debe satisfacer para sobrevivir; cada rincón del mundo es abundante en comestibles increíblemente diversificados. Igualmente, el agua es una necesidad del hombre; sorprendentemente, tres cuartas partes del planeta están cubiertas de agua. El hombre además requiere resguardo de los elementos; en este mundo, hay todas las clases de materiales útiles para construir refugios.
Éstos son sólo algunos de los miles de detalles que hacen posible nuestra vida en la Tierra. De hecho, el hombre vive en un planeta perfectamente diseñado para su supervivencia. Éste es ciertamente un planeta “creado para los seres humanos”,
La interpretación a la que cada persona arriba sobre un asunto, suele ser consecuencia de los “métodos adquiridos de pensamiento”. Es decir, se piensa de la manera que se ha aprendido, o de la manera en que ha sido adoctrinado. Con este método se suele arribar a conclusiones erradas. Sin embargo, si se logran dejar de lado los prejuicios, y se realiza un razonamiento crítico de las condiciones de nuestra existencia y cómo esta es posible, se saldrá ciertamente de los límites del pensamiento trivial y se comenzará a reflexionar y a cuestionar:
¿Cómo la atmósfera sirve como un techo protector para la tierra?
¿Cómo cada una de los billones de células en el cuerpo humano se organizan y realizan sus tareas individuales?
¿Cómo este equilibrio ecológico extraordinario existe en la tierra?
Una persona que busca respuestas a estas preguntas ciertamente procede de la manera correcta. No permanece insensible a las cosas que suceden a su alrededor, y no se conforma con la ignorancia sobre la extraordinaria naturaleza del mundo. Una persona que se hace preguntas, que reflexiona sobre ellas y que da respuestas a las mismas, comprenderá que, cada centímetro del planeta, está dominado por un perfecto plan y un perfecto orden.
¿Cómo es que llegó a existir este perfecto orden en el universo?
¿Quién estableció los equilibrios tan delicados que observamos en el mundo?
¿Cómo hicieron los seres vivos, increíblemente diversificados en la naturaleza, para surgir?
El mantenerse ocupado con una investigación implacable para poder contestar estas preguntas, da como resultado un claro conocimiento de que todo en el universo, su orden, cada ser viviente y cada estructura es componente de un plan, el producto de un diseño. Cada detalle lo es: la estructura excelente del ala de un insecto, el sistema que permite a un árbol llevar litros de agua a sus más altas ramas, el orden de los planetas, y la proporción de gases en la atmósfera; todos son ejemplos únicos de perfección.
En cada detalle del mundo, que es infinitamente variado, encontrará el hombre rastros de su Creador. Dios, el dueño del universo entero, se da a conocer al hombre a través del perfecto diseño de Su creación. Todo lo que nos rodea, los pájaros en el vuelo, nuestros corazones palpitando, el nacimiento de un niño o la existencia del Sol manifiestan el poder de Dios y Su creación. Y lo que el hombre debe hacer, es comprender esta realidad.
Estos propósitos deben su existencia al hecho de que todo ha sido creado. Una persona inteligente se da cuenta que la planificación, el diseño y la sabiduría están presentes en cada detalle del universo; y esto la lleva al reconocimiento del Creador.
Todos los seres vivientes, y también las cosas inanimadas, evidencian la existencia y la grandeza de Dios, basta con mirar a nuestro alrededor para darnos cuenta de esto. Debemos esforzarnos de la mejor manera por demostrar nuestro aprecio por la grandeza eterna de Dios. La existencia de Dios es obvia, e ignorarlo sería sólo el principio del más grande daño que podríamos hacernos a nosotros mismos. Porque Dios no padece ninguna necesidad. Él es el Único que muestra Su grandeza en todas las cosas y de todas las maneras posibles.
Dios es el dueño de todo, de los cielos y la Tierra.
Si creo en Dios porque esa es mi fe. Aunque no lo vea yo se que esta a mi lado. El me creo. Las hadas...no creo aunque me digas que las sientes. Cada persona cree en distintas cosas o personas. Yo creo en DIOS....