La iglesia verdadera sera la que construya el Cristo en su segunda venida hoy no existe Ninguna cumple la ley , por ejemplo Mateo 6 donde prohibe orar en publico y solo deja como oración el Padre Nuestro , llamando hipócritas a los que oran en las iglesias y en las plazas , así como los que usan muchas palabras al orar Saludos
La que predique que CRISTO es el salvador de la humanidad, porque dió su vida por vos y por mi... todo lo que debemos saber esta en la biblia... las iglesias verdaderas son las que predican solo de la biblia... lo importante es que tengas un encuentro personal con Dios, en oración... Bendiciones. Martín
Yo particularmente creo mas en Dios que en la iglesia, la verdadera iglesia es decir el hogar de Cristo habita en nuestros corazones, ya que de algun modo para el es un gusto establecerse alli para asi ayudarnos y guiarnos
¿es razonable, o más importante aún, es bíblico, concluir que todo grupo religioso que afirma utilizar la Biblia enseña la religión verdadera? ¿Practica la religión correcta todo el que lleva una Biblia o cita de ella?
11 Muchos clérigos, aunque tienen la Biblia, se valen de la religión para glorificarse a sí mismos. Diluyen las verdades puras con tradiciones y filosofías humanas. ¿Acepta Dios su adoración? A los guías religiosos que hacían eso en Jerusalén en el siglo primero, Jesucristo les aplicó apropiadamente esta declaración que Dios había hecho mediante el profeta Isaías: “Este pueblo me honra con los labios, pero su corazón está muy alejado de mí. En vano siguen adorándome, porque enseñan mandatos de hombres como doctrinas”. (Mateo 15:8, 9; 23:5-10.) Desde luego, una religión como esa no es la verdadera.
12 ¿Y si el fruto que producen las enseñanzas de ciertas religiones, manifestado por la vida que llevan los adeptos que gozan de buena reputación, es un fruto podrido? En el Sermón del Monte, Jesús advirtió: “Guárdense de los falsos profetas [...]. Por sus frutos los reconocerán. [...,] todo árbol bueno produce fruto excelente, pero todo árbol podrido produce fruto inservible”. (Mateo 7:15-17.) Es cierto que algunas personas pudieran cometer algún mal y necesitar corrección. Sin embargo, la situación es diferente cuando los miembros de las iglesias, incluso los clérigos, se entregan a la fornicación y el adulterio, las peleas, la borrachera, la codicia, las mentiras, el espiritismo, la adoración de ídolos —a cualquiera de estas prácticas o a todas—, y no se les disciplina ni se excluye de la congregación a los que persisten en tal proceder. La Biblia dice con claridad que los que practican tales cosas deben ser expulsados de la congregación; no habrá lugar para ellos en el Reino de Dios. (Gálatas 5:19-21.) Su adoración no agrada a Dios ni le agradará la nuestra si nos relacionamos con aquellos a quienes él rechaza. (1 Corintios 5:11-13; 6:9, 10; Revelación 21:8.)
13 Es obvio que no todos los grupos que dicen utilizar la Biblia practican la religión verdadera que esta presenta. Por lo tanto, ¿qué características nos da la Biblia para identificar la religión verdadera?
Características que identifican la religión verdadera
14 Sus enseñanzas se basan sólidamente en las Escrituras inspiradas. “Toda Escritura es inspirada de Dios y provechosa para enseñar, para censurar, para rectificar las cosas”. (2 Timoteo 3:16.) Pero ¿dónde habla la Santa Biblia de la Trinidad que enseña la cristiandad? Y ¿dónde enseña la Biblia, como lo hace el clero, que los seres humanos tengan un alma que sobrevive a la muerte del cuerpo físico? ¿Ha pedido alguna vez a un clérigo que le muestre esas enseñanzas en su Biblia? La New Encyclopædia Britannica comenta: “Ni la palabra Trinidad ni la doctrina explícita aparecen en el Nuevo Testamento” (1992, Micropædia, tomo 11, página 928). También la New Catholic Encyclopedia reconoce: “Entre los Padres Apostólicos no había existido nada que siquiera remotamente se acercara a tal mentalidad o perspectiva” (1967, tomo XIV, página 299). Respecto al concepto que tiene la cristiandad de que el alma se separa del cuerpo cuando este muere, algunos eruditos eclesiásticos confiesan que adoptaron esa idea de la filosofía griega. La religión verdadera, en cambio, no reemplaza la verdad bíblica por la filosofía humana. (Génesis 2:7; Deuteronomio 6:4; Ezequiel 18:4; Juan 14:28.)
15 La religión verdadera aboga a favor de la adoración del único Dios verdadero, Jehová. (Deuteronomio 4:35; Juan 17:3.) Parafraseando Deuteronomio 5:9, Jesucristo afirmó: “Es a Jehová tu Dios a quien tienes que adorar, y es solo a él a quien tienes que rendir servicio sagrado”. (Mateo 4:10.) En conformidad con estas palabras, Jesús dio a conocer el nombre de su Padre a sus discípulos. (Juan 17:26.) ¿Le ha enseñado su religión a adorar a Jehová? ¿Ha llegado a conocer a la Persona a quien identifica ese nombre —sus propósitos, actividades y cualidades— a tal grado que siente que puede acercarse a él con toda confianza? Si su religión es la verdadera, su respuesta será afirmativa. (Lucas 10:22; 1 Juan 5:14.)
16 Una parte importante de la adoración que agrada a Dios es la fe en su Hijo, Jesucristo. (Juan 3:36; Hechos 4:12.) Esto no significa sencillamente creer que Jesús vivió o que fue una persona sobresaliente. Incluye que entendamos lo que la Biblia enseña sobre el valor del sacrificio de su vida humana perfecta y que reconozcamos su actual puesto de Rey celestial. (Salmo 2:6-8; Juan 3:16; Revelación 12:10.) Si usted se relaciona con los que practican la religión verdadera, sabe que en su vida cotidiana se esfuerzan concienzudamente por obedecer a Jesús, imitar su ejemplo y tener una participación personal y celosa en la obra que él encomendó a sus discípulos. (Mateo 28:19, 20; Juan 15:14; 1 Pedro 2:21.) Si sus correligionarios no obran así, usted debe buscar otra religión.
17 La adoración verdadera no se contamina por mezclarse en los asuntos políticos o en los conflictos mundanos. (Santiago 1:27.) ¿Por qué no? Debido a lo que Jesús dijo acerca de sus seguidores: “Ellos no son parte del mundo, así como yo no soy parte del mundo”. (Juan 17:16.) Jesús no se inmiscuyó en la política e impidió que sus seguidores recurrieran a las armas carnales. (Mateo 26:52.) Los que toman a pecho los dichos de la Palabra de Dios ‘no aprenden más la guerra’. (Isaías 2:2-4.) Si usted pertenece, aunque sea nominalmente, a una religión que no encaja en esos moldes, es tiempo de que rompa toda relación con ella. (Santiago 4:4; Revelación 18:4, 5.)
18 La religión verdadera enseña y practica el amor altruista. (Juan 13:35; 1 Juan 3:10-12.) Tal amor no es solo objeto de comentario en los sermones. Une realmente en una verdadera hermandad a personas de toda raza, nivel económico, idioma y nación. (Revelación 7:9, 10.) Distingue a los cristianos verdaderos del mundo que los rodea. Si aún no lo ha hecho, asista a las reuniones en un Salón del Reino de los Testigos de Jehová, así como a sus asambleas más grandes. Observe cómo trabajan en unidad cuando construyen un Salón del Reino. Fíjese en su manera de tratar a los mayores (incluso a las viudas) y a los jóvenes (entre estos a los que solo tienen a uno de sus padres o no tienen a ninguno). (Santiago 1:27.) Compare lo que observa con lo que ha visto en las demás religiones. Luego pregúntese: ‘¿Quiénes son los que practican la religión verdadera?’.
19 La religión verdadera aboga a favor del Reino de Dios como la solución duradera a los problemas de la humanidad. (Daniel 2:44; 7:13, 14; 2 Pedro 3:13; Revelación 21:4, 5.) ¿Hacen eso las iglesias de la cristiandad? ¿Ha oído alguna vez a un clérigo explicar qué es el Reino de Dios y lo que las Escrituras dicen que logrará? ¿Lo anima la organización a la que usted pertenece a hablar a otros sobre el Reino de Dios? Y si así es, ¿participan todos los miembros en esa obra? Jesús dio ese testimonio, y lo mismo hicieron sus primeros discípulos. Asimismo, usted puede tener el privilegio de participar en esta actividad. Es la obra más importante que se lleva a cabo en toda la Tierra hoy día. (Mateo 24:14.)
20 A pesar de que hay miles de religiones, la Biblia rápidamente nos ayuda a eliminar la confusión y a identificar la verdadera. No obstante, tenemos que hacer más que identificarla. Es esencial que la practiquemos.
LÓGICAMENTE debe haber solamente una religión verdadera. Esto está en armonía con el hecho de que el Dios verdadero “no es Dios de desorden, sino de paz.” (1 Corintios 14:33) Además, Jesucristo dijo que los que practicaban esa religión adoraban a Dios “con espíritu y con verdad,” y la verdad nunca está en desacuerdo consigo misma. (Juan 4:23, 24) Pero, ¿quiénes son estos adoradores verdaderos hoy día? ¿Cómo puede uno identificarlos y saber que la adoración que ellos practican es verdaderamente la que Dios aprueba?
2 Esto no se puede decidir sencillamente sobre la base de lo que afirman ser ciertas personas y organizaciones. En su Sermón del Monte, Jesús señaló que muchos lo llamarían “Señor, Señor,” afirmando haber hecho cosas notables en el nombre de él. Sin embargo, él les diría: “¡Nunca los conocí! Apártense de mí, obreros del desafuero.” No solo las palabras, sino también las apariencias pueden ser engañosas. Jesús dijo que falsos profetas vendrían con disfraz de ovejas, mientras que por dentro serían como lobos voraces. No obstante, nos dio una regla por la cual podemos distinguir entre los siervos verdaderos de Dios y los falsos, diciendo: “Por sus frutos los reconocerán.” Él mostró que lo que verdaderamente determina si somos o no verdaderos adoradores de Dios no es meramente lo que afirmamos, ni aun nuestras obras aparentemente dignas de encomio, sino el que verdaderamente hagamos la voluntad del Padre celestial.—Mateo 7:15-23.
3 Un fiel seguidor de Jesús, el apóstol Pablo, también mostró la necesidad de ejercer cautela. Advirtió que algunos hombres parecerían ser ministros de la justicia y sin embargo serían cristianos falsos. Externamente quizás no parezcan malos. Pero cuando se les mide a la luz de la Palabra de Dios, la Biblia, se ve que son ministros del enemigo de Dios, Satanás, porque sus obras verdaderamente están en oposición a la voluntad de Dios. (2 Corintios 11:13-15) El que siguiéramos la dirección de tales cristianos falsos solo podría dar por resultado el que no alcanzáramos la vida eterna.
APLICANDO LA REGLA
4 Entonces, ¿cuáles son algunas de las marcas identificadoras de los verdaderos adoradores de Dios? ¿Cuáles son los frutos excelentes que produciría
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La iglesia verdadera sera la que construya el Cristo en su segunda venida hoy no existe Ninguna cumple la ley , por ejemplo Mateo 6 donde prohibe orar en publico y solo deja como oración el Padre Nuestro , llamando hipócritas a los que oran en las iglesias y en las plazas , así como los que usan muchas palabras al orar Saludos
la que tu idea religiosa crea que es la verdadera
LA QUE CUMPLA CON LA DOTRINA DE CRISTO LEE LA GUIA QUE ES LA BIBLIA ELLA TE ARA LIBRE
No es iglesia, es la organización de los testigos de jehova o el reino de jehova.
Bueno, eso dicen ellos.
Como ya te dijeron, la iglesia eres tu.
La que predique que CRISTO es el salvador de la humanidad, porque dió su vida por vos y por mi... todo lo que debemos saber esta en la biblia... las iglesias verdaderas son las que predican solo de la biblia... lo importante es que tengas un encuentro personal con Dios, en oración... Bendiciones. Martín
..la verdadera,no se,la que mas ilumina decía uno que la que más ilumina es la que arde...pero es un poco gore esto no?...en fin,saludos..
Ningunaaaaaaaaaaaaaa
la que tú creeas que es la verdadera
Yo particularmente creo mas en Dios que en la iglesia, la verdadera iglesia es decir el hogar de Cristo habita en nuestros corazones, ya que de algun modo para el es un gusto establecerse alli para asi ayudarnos y guiarnos
Un abrazo...
cualquier iglesia es verdadera pero si lo que buscas es cual es la que dice la verdad pues ninguna
¿es razonable, o más importante aún, es bíblico, concluir que todo grupo religioso que afirma utilizar la Biblia enseña la religión verdadera? ¿Practica la religión correcta todo el que lleva una Biblia o cita de ella?
11 Muchos clérigos, aunque tienen la Biblia, se valen de la religión para glorificarse a sí mismos. Diluyen las verdades puras con tradiciones y filosofías humanas. ¿Acepta Dios su adoración? A los guías religiosos que hacían eso en Jerusalén en el siglo primero, Jesucristo les aplicó apropiadamente esta declaración que Dios había hecho mediante el profeta Isaías: “Este pueblo me honra con los labios, pero su corazón está muy alejado de mí. En vano siguen adorándome, porque enseñan mandatos de hombres como doctrinas”. (Mateo 15:8, 9; 23:5-10.) Desde luego, una religión como esa no es la verdadera.
12 ¿Y si el fruto que producen las enseñanzas de ciertas religiones, manifestado por la vida que llevan los adeptos que gozan de buena reputación, es un fruto podrido? En el Sermón del Monte, Jesús advirtió: “Guárdense de los falsos profetas [...]. Por sus frutos los reconocerán. [...,] todo árbol bueno produce fruto excelente, pero todo árbol podrido produce fruto inservible”. (Mateo 7:15-17.) Es cierto que algunas personas pudieran cometer algún mal y necesitar corrección. Sin embargo, la situación es diferente cuando los miembros de las iglesias, incluso los clérigos, se entregan a la fornicación y el adulterio, las peleas, la borrachera, la codicia, las mentiras, el espiritismo, la adoración de ídolos —a cualquiera de estas prácticas o a todas—, y no se les disciplina ni se excluye de la congregación a los que persisten en tal proceder. La Biblia dice con claridad que los que practican tales cosas deben ser expulsados de la congregación; no habrá lugar para ellos en el Reino de Dios. (Gálatas 5:19-21.) Su adoración no agrada a Dios ni le agradará la nuestra si nos relacionamos con aquellos a quienes él rechaza. (1 Corintios 5:11-13; 6:9, 10; Revelación 21:8.)
13 Es obvio que no todos los grupos que dicen utilizar la Biblia practican la religión verdadera que esta presenta. Por lo tanto, ¿qué características nos da la Biblia para identificar la religión verdadera?
Características que identifican la religión verdadera
14 Sus enseñanzas se basan sólidamente en las Escrituras inspiradas. “Toda Escritura es inspirada de Dios y provechosa para enseñar, para censurar, para rectificar las cosas”. (2 Timoteo 3:16.) Pero ¿dónde habla la Santa Biblia de la Trinidad que enseña la cristiandad? Y ¿dónde enseña la Biblia, como lo hace el clero, que los seres humanos tengan un alma que sobrevive a la muerte del cuerpo físico? ¿Ha pedido alguna vez a un clérigo que le muestre esas enseñanzas en su Biblia? La New Encyclopædia Britannica comenta: “Ni la palabra Trinidad ni la doctrina explícita aparecen en el Nuevo Testamento” (1992, Micropædia, tomo 11, página 928). También la New Catholic Encyclopedia reconoce: “Entre los Padres Apostólicos no había existido nada que siquiera remotamente se acercara a tal mentalidad o perspectiva” (1967, tomo XIV, página 299). Respecto al concepto que tiene la cristiandad de que el alma se separa del cuerpo cuando este muere, algunos eruditos eclesiásticos confiesan que adoptaron esa idea de la filosofía griega. La religión verdadera, en cambio, no reemplaza la verdad bíblica por la filosofía humana. (Génesis 2:7; Deuteronomio 6:4; Ezequiel 18:4; Juan 14:28.)
15 La religión verdadera aboga a favor de la adoración del único Dios verdadero, Jehová. (Deuteronomio 4:35; Juan 17:3.) Parafraseando Deuteronomio 5:9, Jesucristo afirmó: “Es a Jehová tu Dios a quien tienes que adorar, y es solo a él a quien tienes que rendir servicio sagrado”. (Mateo 4:10.) En conformidad con estas palabras, Jesús dio a conocer el nombre de su Padre a sus discípulos. (Juan 17:26.) ¿Le ha enseñado su religión a adorar a Jehová? ¿Ha llegado a conocer a la Persona a quien identifica ese nombre —sus propósitos, actividades y cualidades— a tal grado que siente que puede acercarse a él con toda confianza? Si su religión es la verdadera, su respuesta será afirmativa. (Lucas 10:22; 1 Juan 5:14.)
16 Una parte importante de la adoración que agrada a Dios es la fe en su Hijo, Jesucristo. (Juan 3:36; Hechos 4:12.) Esto no significa sencillamente creer que Jesús vivió o que fue una persona sobresaliente. Incluye que entendamos lo que la Biblia enseña sobre el valor del sacrificio de su vida humana perfecta y que reconozcamos su actual puesto de Rey celestial. (Salmo 2:6-8; Juan 3:16; Revelación 12:10.) Si usted se relaciona con los que practican la religión verdadera, sabe que en su vida cotidiana se esfuerzan concienzudamente por obedecer a Jesús, imitar su ejemplo y tener una participación personal y celosa en la obra que él encomendó a sus discípulos. (Mateo 28:19, 20; Juan 15:14; 1 Pedro 2:21.) Si sus correligionarios no obran así, usted debe buscar otra religión.
17 La adoración verdadera no se contamina por mezclarse en los asuntos políticos o en los conflictos mundanos. (Santiago 1:27.) ¿Por qué no? Debido a lo que Jesús dijo acerca de sus seguidores: “Ellos no son parte del mundo, así como yo no soy parte del mundo”. (Juan 17:16.) Jesús no se inmiscuyó en la política e impidió que sus seguidores recurrieran a las armas carnales. (Mateo 26:52.) Los que toman a pecho los dichos de la Palabra de Dios ‘no aprenden más la guerra’. (Isaías 2:2-4.) Si usted pertenece, aunque sea nominalmente, a una religión que no encaja en esos moldes, es tiempo de que rompa toda relación con ella. (Santiago 4:4; Revelación 18:4, 5.)
18 La religión verdadera enseña y practica el amor altruista. (Juan 13:35; 1 Juan 3:10-12.) Tal amor no es solo objeto de comentario en los sermones. Une realmente en una verdadera hermandad a personas de toda raza, nivel económico, idioma y nación. (Revelación 7:9, 10.) Distingue a los cristianos verdaderos del mundo que los rodea. Si aún no lo ha hecho, asista a las reuniones en un Salón del Reino de los Testigos de Jehová, así como a sus asambleas más grandes. Observe cómo trabajan en unidad cuando construyen un Salón del Reino. Fíjese en su manera de tratar a los mayores (incluso a las viudas) y a los jóvenes (entre estos a los que solo tienen a uno de sus padres o no tienen a ninguno). (Santiago 1:27.) Compare lo que observa con lo que ha visto en las demás religiones. Luego pregúntese: ‘¿Quiénes son los que practican la religión verdadera?’.
19 La religión verdadera aboga a favor del Reino de Dios como la solución duradera a los problemas de la humanidad. (Daniel 2:44; 7:13, 14; 2 Pedro 3:13; Revelación 21:4, 5.) ¿Hacen eso las iglesias de la cristiandad? ¿Ha oído alguna vez a un clérigo explicar qué es el Reino de Dios y lo que las Escrituras dicen que logrará? ¿Lo anima la organización a la que usted pertenece a hablar a otros sobre el Reino de Dios? Y si así es, ¿participan todos los miembros en esa obra? Jesús dio ese testimonio, y lo mismo hicieron sus primeros discípulos. Asimismo, usted puede tener el privilegio de participar en esta actividad. Es la obra más importante que se lleva a cabo en toda la Tierra hoy día. (Mateo 24:14.)
20 A pesar de que hay miles de religiones, la Biblia rápidamente nos ayuda a eliminar la confusión y a identificar la verdadera. No obstante, tenemos que hacer más que identificarla. Es esencial que la practiquemos.
LÓGICAMENTE debe haber solamente una religión verdadera. Esto está en armonía con el hecho de que el Dios verdadero “no es Dios de desorden, sino de paz.” (1 Corintios 14:33) Además, Jesucristo dijo que los que practicaban esa religión adoraban a Dios “con espíritu y con verdad,” y la verdad nunca está en desacuerdo consigo misma. (Juan 4:23, 24) Pero, ¿quiénes son estos adoradores verdaderos hoy día? ¿Cómo puede uno identificarlos y saber que la adoración que ellos practican es verdaderamente la que Dios aprueba?
2 Esto no se puede decidir sencillamente sobre la base de lo que afirman ser ciertas personas y organizaciones. En su Sermón del Monte, Jesús señaló que muchos lo llamarían “Señor, Señor,” afirmando haber hecho cosas notables en el nombre de él. Sin embargo, él les diría: “¡Nunca los conocí! Apártense de mí, obreros del desafuero.” No solo las palabras, sino también las apariencias pueden ser engañosas. Jesús dijo que falsos profetas vendrían con disfraz de ovejas, mientras que por dentro serían como lobos voraces. No obstante, nos dio una regla por la cual podemos distinguir entre los siervos verdaderos de Dios y los falsos, diciendo: “Por sus frutos los reconocerán.” Él mostró que lo que verdaderamente determina si somos o no verdaderos adoradores de Dios no es meramente lo que afirmamos, ni aun nuestras obras aparentemente dignas de encomio, sino el que verdaderamente hagamos la voluntad del Padre celestial.—Mateo 7:15-23.
3 Un fiel seguidor de Jesús, el apóstol Pablo, también mostró la necesidad de ejercer cautela. Advirtió que algunos hombres parecerían ser ministros de la justicia y sin embargo serían cristianos falsos. Externamente quizás no parezcan malos. Pero cuando se les mide a la luz de la Palabra de Dios, la Biblia, se ve que son ministros del enemigo de Dios, Satanás, porque sus obras verdaderamente están en oposición a la voluntad de Dios. (2 Corintios 11:13-15) El que siguiéramos la dirección de tales cristianos falsos solo podría dar por resultado el que no alcanzáramos la vida eterna.
APLICANDO LA REGLA
4 Entonces, ¿cuáles son algunas de las marcas identificadoras de los verdaderos adoradores de Dios? ¿Cuáles son los frutos excelentes que produciría