Amix.... solo se hace wey, pero tu ni enterada de la verdadera situación, al contrario, sigues ahà de lambewevos, que tan wenas chanbas hace? ke por cierto, deja te sugiero, son las mesmitas que hace cualquier cargador de la central de abastos, o cualkier viene viene, ubicate y mandalo directio a chostomoland...
Cuando tu pareja te esta mintiendo, sea por lo que sea, y lo descubres en esa mentira, cuando le reclamas, o le cuestionas, la ofendida eres tu no el, pero que pasa si se intercambian los papeles? El ahora resulta el ofendido al tu cuestionarle cosas.
En primera es un juego de manipulacion el que tu pareja esta haciendo contigo, ya que te mienta y al tu reclamarle utiliza esa tactica para hacerte sentir mal, y tu seas quien al final le piuda person y si no es de esta manera, entonces no pase nada al final y felices como siempre.
Es una forma de retenerte a su lado, porque l sabe que aunque te este mintiendo,, aunque tu le reclames, el sale ganando siempre.
No caigas en su juego, no es sano principalmente para ti, puede que tenga una patologia tu pareja o utilize esos jueguitos para manipular a quein sea con tal de obtener lo que quiere, obtener sus objetivos.
Te repito, no es sano para ti, primeramente porque te miente y tu no mereces eso, y segundo porque te manipula.
Mira solo te escribo por que estoy siguiendo las respuestas de ese tipo Isma Q ya que si lo haces lo que el te recomienda lo que pasa es que tu saldo se trasfiere al de el, el primer num que te da corresponde a su celular aguas!!
Amiga, no se porque unas personas son asi verdaderamente lo lamento, espero que te sirva este reportaje que encontre............
ÿPOR QUÉ MENTIMOS?
El lenguaje propio de los hombres es rico, variadÃÂsimo... en mentiras y subterfugios. La ley de moda es aprender a decir la mayor cantidad posible de palabras sin decir nada, o diciendo lo contrario de lo que se quiere decir
Sin tener que recurrir a definiciones precisas, sabemos sin duda alguna lo que son las mentiras. Todos las hemos usado y las hemos padecido. Nos gustarÃÂa erradicarlas y sin embargo terminamos por aceptarlas como un mal necesario e imbatible.
No pretendemos agotar los variadÃÂsimos matices que puede asumir la mentira; sólo apuntar algunos de sus aspectos más corrientes.
El silencio, el callar cuando debemos decir algo importante y verdadero, es una forma de mentir. Es abstención de la verdad.
Hay quien considera este silencio como un acto de discreción, pero hasta la discreción tiene un lÃÂmite, pasado el cual hace más daño que beneficio.
El disimulo lleva a actuar como si uno no supiese nada de nada o acabara de enterarse de algo que conocÃÂa sobradamente. Es evasión de la verdad.
Aparece debajo de rostros falsamente sorprendidos, palabras ambiguas que no expresan más que el deseo de salir del paso. Es la sonrisa forzada, o el ëlo siento tantoû que en realidad no siente nada; son lágrimas de cocodrilo y abrazos efusivos cargados de cinismo.
El que disimula se ve obligado a cambiar muchas veces de opinión, no porque pase en conciencia de una opinión a otra, sino porque necesita muchas máscaras para adaptarse a las circunstancias. No es de extrañar oÃÂrle decir una cosa radicalmente opuesta a la expresada una hora antes, pero las dos son tan ambiguas y resbaladizas...
Dejando de lado la piedad que fuerza a moderar o alterar un poco la verdad para no alterar o para moderar los ánimos de quienes están seriamente afectados por alguna forma de dolor, la que nos preocupa es la mentira pura, la más habitual en la convivencia diaria. Esa es la que duele y la que, curiosamente, se acepta de buen o mal grado, pero se acepta al fin.
DIFERENTES FORMAS DE LENGUAJE
Por muchos idiomas que un ser humano haya aprendido a usar, hay otros lenguajes que demuestran facetas más ÃÂntimas de su personalidad; son lenguajes internacionales más ricos y significativos de lo que parece.
El hombre, parte integrante de la Naturaleza, se acopla a las caracterÃÂsticas de los diversos reinos de vida. Tiene algo de las piedras, algo de las plantas, de los animales y, claro está, algo de los humanos.
De las piedras hemos copiado el estatismo, aquello de que no se nos mueva ni un músculo al menos en el rostro, saber asumir la que no en vano llamamos cara de piedra. Equivale a la antes citada mentira del silencio.
De las plantas hemos aprendido a movernos como las ramas, a impulsos de los vientos de las opiniones y en tan diversas direcciones que alguna de ellas no debe ser acertada, no porque no haya diversas direcciones de opinión, sino porque no podemos asumirlas todas a un tiempo ni agitarnos con vientos que soplen desde todos los ángulos con escasas horas de diferencia.
De los animales tenemos el lenguaje de los gestos, esos tan espontáneos que no dan oportunidad al engaño. AsÃÂ, aunque las palabras digan una cosa, los movimientos del cuerpo, por imperceptibles que sean, dicen otra. Aunque en la actualidad hay una profusa literatura sobre el lenguaje del cuerpo y el lenguaje no verbal y esos conocimientos podrÃÂan ponernos sobre aviso, el impulso instintivo supera el conocimiento racional: un rostro, unos ojos, unas manos hablan más que una boca, o se ajustan más a la verdad.
El lenguaje propio de los hombres es rico, variadÃÂsimo... en mentiras y subterfugios. La ley de moda es aprender a decir la mayor cantidad posible de palabras sin decir nada, o diciendo lo contrario de lo que se quiere decir.
No queremos afirmar con esto que la mentira sea el lenguaje propio del hombre, pero sàque todos los hombres saben jugar con el lenguaje adaptándolo a lo que les conviene decir, cosa que no pueden hacer las piedras, las plantas ni los animales. Lástima que esa plasticidad no se ponga al servicio de la inteligencia en lugar de la astucia. Decir la verdad suele ser peligroso y no entra en el juego de las sociedades â€Åcivilizadasâ€.
ÿPOR QUÉ LAS MENTIRAS?
En general encontraremos un factor psicológico común a todos los casos, con los matices de rigor: es el miedo. Esa es la verdadera enfermedad y las mentiras son sus sÃÂntomas o sus efectos declarados.
El que cambia de opiniones según sople el viento de las aceptaciones de moda, demuestra un miedo pavoroso a perder el aprecio de los de su entorno. Diferenciarse de los otros, mantener una verdad que los demás ocultan, falsean o ignoran, es destacarse como la oveja negra... y eso implica mucho valor. Es más fácil cubrirse bajo el manto común de la mentira aceptada por todos y formar parte de ese grupo que se ha hecho fuerte en su unión.
El que disimula lo que siente y lo que piensa tiene miedo a mostrarse tal cual es, bien sea porque teme conocerse o porque no quiere que los demás lo vean desnudo por dentro, lo que equivale a decir saberlo indefenso. Nada más terrible que sufrir el desprecio de quienes se congregan en torno a unos valores de moda, de quienes logran destruir con muy variados medios al que da la cara limpia y abiertamente.
El lema en sencillo: si todos mentimos en las mismas cosas, esa mentira deja de serlo para convertirse en realidad.
Que la mentira es mentira salta en el lenguaje inconsciente de los gestos. Esto nos llevarÃÂa a concluir que el animal (o el inconsciente, da igual) que subyace en todos nosotros, es más verdadero que el humano ëbarnizadoû de cultura.
Señalábamos el miedo como su principal factor desencadenante, al que pueden agregarse el egoÃÂsmo, la cobardÃÂa, la falta de seguridad en sàmismo, la fantasÃÂa descontrolada que no diferencia lo verdadero de lo falso, y aun la misma maldad, el deseo de dañar.
Si tales son las causas, los efectos no son menos terribles y peligrosos.
Se pierden horas incalculables en conversaciones donde se habla de lo que no es, o se escribe para demostrar lo indemostrable o se informa deformando. Y ese tiempo no se puede recuperar...
Lo fundamental es superar el miedo, pero no se le puede eliminar de buenas a primeras. Hay que sustituirlo paulatinamente por otras emociones superiores y de mayor calidad.
Empecemos por la cortesÃÂa en el sentido más sano del concepto: un respeto generoso por los demás y por uno mismo. La cortesÃÂa incluye tal vez una silenciosa descripción o alguna mentira piadosa para aliviar el agobio psicológico, pero es ante todo comprensión y servicio, entrega sincera y elegancia de alma. La mentira burda se desvanece como nube bajo los cálidos rayos del sol ante la potencia regeneradora de la cortesÃÂa cabal. El egoÃÂsmo es apenas una sombra ante el brillo de la cortesÃÂa dadivosa.
Y por último, valor, mucho valor, olvidada virtud que no le falta a las piedras, a las plantas ni a los animales, pero que se esfuma en los hombres a medida que las presiones artificiales de la sociedad le vuelven temeroso y embustero.
MIRA PUDE TENER UN AMANTE OSOLO QUIERE ESTAR SOLO UN TIENPO PARA PEND¡SAR LO QUE QUIERE POR QUE NO TRATAS DE PLATICAR PERO SIN DISCUTIR Y DALE TIENPO QUE LO PIENSE PERO LA VERDA CREO QUE NO LE DA INPORTANCIA
Este tipo es inteligente!!! Bueno, debes tener evidencias irrefutables, de lo contrario no lo va a aceptar. Un amigo me dijo una vez que si mi pareja me atrapa en algo indebido, que siempre lo niegue, hasta morir!!! imaginate, los hombres somos asÃ. casi todos!!
la verdad... yo creo que es importante que te respondas tu misma, cuando hay mentiras en una relacion es por que definitivamente el que miento no esta realmente comprometido yo creo que cuando compartes tuj vida con alguien es para ser mucho mas feliz de lo que eras sin esa persona. la honestidad es basica, si tu pareja no es honesto contigo... debes decir adios!
Answers & Comments
Verified answer
Para que quiere un hombre que te miente y no es capaz de afrontar sus hechos.
Amix.... solo se hace wey, pero tu ni enterada de la verdadera situación, al contrario, sigues ahà de lambewevos, que tan wenas chanbas hace? ke por cierto, deja te sugiero, son las mesmitas que hace cualquier cargador de la central de abastos, o cualkier viene viene, ubicate y mandalo directio a chostomoland...
Hola, soy psicologa.
Cuando tu pareja te esta mintiendo, sea por lo que sea, y lo descubres en esa mentira, cuando le reclamas, o le cuestionas, la ofendida eres tu no el, pero que pasa si se intercambian los papeles? El ahora resulta el ofendido al tu cuestionarle cosas.
En primera es un juego de manipulacion el que tu pareja esta haciendo contigo, ya que te mienta y al tu reclamarle utiliza esa tactica para hacerte sentir mal, y tu seas quien al final le piuda person y si no es de esta manera, entonces no pase nada al final y felices como siempre.
Es una forma de retenerte a su lado, porque l sabe que aunque te este mintiendo,, aunque tu le reclames, el sale ganando siempre.
No caigas en su juego, no es sano principalmente para ti, puede que tenga una patologia tu pareja o utilize esos jueguitos para manipular a quein sea con tal de obtener lo que quiere, obtener sus objetivos.
Te repito, no es sano para ti, primeramente porque te miente y tu no mereces eso, y segundo porque te manipula.
Mira solo te escribo por que estoy siguiendo las respuestas de ese tipo Isma Q ya que si lo haces lo que el te recomienda lo que pasa es que tu saldo se trasfiere al de el, el primer num que te da corresponde a su celular aguas!!
Ese truco es viejisimo, pero muchos aun caen
Amiga, no se porque unas personas son asi verdaderamente lo lamento, espero que te sirva este reportaje que encontre............
ÿPOR QUÉ MENTIMOS?
El lenguaje propio de los hombres es rico, variadÃÂsimo... en mentiras y subterfugios. La ley de moda es aprender a decir la mayor cantidad posible de palabras sin decir nada, o diciendo lo contrario de lo que se quiere decir
Sin tener que recurrir a definiciones precisas, sabemos sin duda alguna lo que son las mentiras. Todos las hemos usado y las hemos padecido. Nos gustarÃÂa erradicarlas y sin embargo terminamos por aceptarlas como un mal necesario e imbatible.
ÿPor qué? ÿPor qué mentimos a pesar nuestro? ÿPor qué aguantamos que nos mientan? ÿEs que acaso hay algo más fuerte que la mentira que permanece oculto al análisis superficial?
DIFERENTES FORMAS DE MENTIRA
No pretendemos agotar los variadÃÂsimos matices que puede asumir la mentira; sólo apuntar algunos de sus aspectos más corrientes.
El silencio, el callar cuando debemos decir algo importante y verdadero, es una forma de mentir. Es abstención de la verdad.
Hay quien considera este silencio como un acto de discreción, pero hasta la discreción tiene un lÃÂmite, pasado el cual hace más daño que beneficio.
El disimulo lleva a actuar como si uno no supiese nada de nada o acabara de enterarse de algo que conocÃÂa sobradamente. Es evasión de la verdad.
Aparece debajo de rostros falsamente sorprendidos, palabras ambiguas que no expresan más que el deseo de salir del paso. Es la sonrisa forzada, o el ëlo siento tantoû que en realidad no siente nada; son lágrimas de cocodrilo y abrazos efusivos cargados de cinismo.
El que disimula se ve obligado a cambiar muchas veces de opinión, no porque pase en conciencia de una opinión a otra, sino porque necesita muchas máscaras para adaptarse a las circunstancias. No es de extrañar oÃÂrle decir una cosa radicalmente opuesta a la expresada una hora antes, pero las dos son tan ambiguas y resbaladizas...
La mentira puede asumir el tan mentado aspecto de la ëmentira piadosaû, o bien presentarse como auténtica mentira, aquella que tergiversa, falsea y transforma la verdad según los intereses y necesidades.
Dejando de lado la piedad que fuerza a moderar o alterar un poco la verdad para no alterar o para moderar los ánimos de quienes están seriamente afectados por alguna forma de dolor, la que nos preocupa es la mentira pura, la más habitual en la convivencia diaria. Esa es la que duele y la que, curiosamente, se acepta de buen o mal grado, pero se acepta al fin.
DIFERENTES FORMAS DE LENGUAJE
Por muchos idiomas que un ser humano haya aprendido a usar, hay otros lenguajes que demuestran facetas más ÃÂntimas de su personalidad; son lenguajes internacionales más ricos y significativos de lo que parece.
El hombre, parte integrante de la Naturaleza, se acopla a las caracterÃÂsticas de los diversos reinos de vida. Tiene algo de las piedras, algo de las plantas, de los animales y, claro está, algo de los humanos.
De las piedras hemos copiado el estatismo, aquello de que no se nos mueva ni un músculo al menos en el rostro, saber asumir la que no en vano llamamos cara de piedra. Equivale a la antes citada mentira del silencio.
De las plantas hemos aprendido a movernos como las ramas, a impulsos de los vientos de las opiniones y en tan diversas direcciones que alguna de ellas no debe ser acertada, no porque no haya diversas direcciones de opinión, sino porque no podemos asumirlas todas a un tiempo ni agitarnos con vientos que soplen desde todos los ángulos con escasas horas de diferencia.
De los animales tenemos el lenguaje de los gestos, esos tan espontáneos que no dan oportunidad al engaño. AsÃÂ, aunque las palabras digan una cosa, los movimientos del cuerpo, por imperceptibles que sean, dicen otra. Aunque en la actualidad hay una profusa literatura sobre el lenguaje del cuerpo y el lenguaje no verbal y esos conocimientos podrÃÂan ponernos sobre aviso, el impulso instintivo supera el conocimiento racional: un rostro, unos ojos, unas manos hablan más que una boca, o se ajustan más a la verdad.
El lenguaje propio de los hombres es rico, variadÃÂsimo... en mentiras y subterfugios. La ley de moda es aprender a decir la mayor cantidad posible de palabras sin decir nada, o diciendo lo contrario de lo que se quiere decir.
Si bien nos sorprende y asusta el proceso de empobrecimiento de los lenguajes que se van reduciendo en vocablos para refugiarse en vulgares exclamaciones o palabras inventadas de múltiples significados, no deja de maravillarnos que con tan escaso número de términos se pueda seguir mintiendo tan bien.
No queremos afirmar con esto que la mentira sea el lenguaje propio del hombre, pero sàque todos los hombres saben jugar con el lenguaje adaptándolo a lo que les conviene decir, cosa que no pueden hacer las piedras, las plantas ni los animales. Lástima que esa plasticidad no se ponga al servicio de la inteligencia en lugar de la astucia. Decir la verdad suele ser peligroso y no entra en el juego de las sociedades â€Åcivilizadasâ€.
ÿPOR QUÉ LAS MENTIRAS?
En general encontraremos un factor psicológico común a todos los casos, con los matices de rigor: es el miedo. Esa es la verdadera enfermedad y las mentiras son sus sÃÂntomas o sus efectos declarados.
Veamos el caso del que guarda prudente silencio. Lo suyo es miedo a arriesgarse. Intervenir y expresar su auténtica forma de pensar es comprometerse ante sày ante los demás y eso requiere mucho valor. El miedo al riesgo llega, en casos, a una dolorosa cobardÃÂa, que sigue siendo miedo al fin y al cabo.
El que cambia de opiniones según sople el viento de las aceptaciones de moda, demuestra un miedo pavoroso a perder el aprecio de los de su entorno. Diferenciarse de los otros, mantener una verdad que los demás ocultan, falsean o ignoran, es destacarse como la oveja negra... y eso implica mucho valor. Es más fácil cubrirse bajo el manto común de la mentira aceptada por todos y formar parte de ese grupo que se ha hecho fuerte en su unión.
El que disimula lo que siente y lo que piensa tiene miedo a mostrarse tal cual es, bien sea porque teme conocerse o porque no quiere que los demás lo vean desnudo por dentro, lo que equivale a decir saberlo indefenso. Nada más terrible que sufrir el desprecio de quienes se congregan en torno a unos valores de moda, de quienes logran destruir con muy variados medios al que da la cara limpia y abiertamente.
El lema en sencillo: si todos mentimos en las mismas cosas, esa mentira deja de serlo para convertirse en realidad.
La mentira entraña todos los miedos juntos: el miedo a uno mismo, a la gente, a la vida y sus circunstancias, a las situaciones que debemos enfrentar hasta conquistarlas. La mentira es una forma de falsedad que intenta ver las cosas de otra manera de como son, en beneficio propio: si yo no puedo cambiar lo que me hace sufrir –o no sé hacerlo– lo pinto de otro color y me imagino que ya lo he modificado.
ÿHay maldad en estas mentiras? ÿSolamente miedo? ÿNo habrá también un considerable menosprecio hacia el entendimiento y la inteligencia de los demás, de quienes presuntamente no tienen por qué advertir el engaño?
Que la mentira es mentira salta en el lenguaje inconsciente de los gestos. Esto nos llevarÃÂa a concluir que el animal (o el inconsciente, da igual) que subyace en todos nosotros, es más verdadero que el humano ëbarnizadoû de cultura.
ÿPor qué nuestro ëanimalû es más auténtico que nosotros mismos? ÿPor qué los ojos, las manos, los movimientos del cuerpo delatan lo que no queremos o no podemos decir?
EFECTOS DE LA MENTIRA
Señalábamos el miedo como su principal factor desencadenante, al que pueden agregarse el egoÃÂsmo, la cobardÃÂa, la falta de seguridad en sàmismo, la fantasÃÂa descontrolada que no diferencia lo verdadero de lo falso, y aun la misma maldad, el deseo de dañar.
Si tales son las causas, los efectos no son menos terribles y peligrosos.
Pueden apreciarse claramente en la vida de relación que, aunque necesaria y obligada, es falsa, pródiga en resquemores y resentimientos, en heridas que inferimos sin freno pero que no perdonamos viniendo de los otros. La desconfianza campea a sus anchas; en realidad, nadie cree en nadie, y en cierta forma cada cual desconfÃÂa un poco de sàmismo también.
Se pierden horas incalculables en conversaciones donde se habla de lo que no es, o se escribe para demostrar lo indemostrable o se informa deformando. Y ese tiempo no se puede recuperar...
Hay una falta de fe generalizada que va desde la amistad a la polÃÂtica, desde la ciencia a la religión. Si yo miento, ÿpor qué creer que los demás dicen la verdad? ÿA quién creer sin retaceos? ÿDe qué me quieren convencer? ÿQué pretenden obtener de mÃÂ? Si yo intento valerme de otros, ÿpor qué los otros no me utilizarán a mÃÂ?
De aquÃÂ surge una ley que tampoco es verdadera: nadie es sincero en sus expresiones, nadie dice la verdad, todo es mentira...
La vida se vuelve cada vez más artificial y las relaciones humanas son ineficaces por estar asentadas en bases falsas e inestables. Para sobrevivir hay que aprender un nuevo idioma de largo nombre: qué me quieren decir cuando me dicen lo que dicen...
ALGUNAS SOLUCIONES
Lo fundamental es superar el miedo, pero no se le puede eliminar de buenas a primeras. Hay que sustituirlo paulatinamente por otras emociones superiores y de mayor calidad.
Empecemos por la cortesÃÂa en el sentido más sano del concepto: un respeto generoso por los demás y por uno mismo. La cortesÃÂa incluye tal vez una silenciosa descripción o alguna mentira piadosa para aliviar el agobio psicológico, pero es ante todo comprensión y servicio, entrega sincera y elegancia de alma. La mentira burda se desvanece como nube bajo los cálidos rayos del sol ante la potencia regeneradora de la cortesÃÂa cabal. El egoÃÂsmo es apenas una sombra ante el brillo de la cortesÃÂa dadivosa.
Sigamos por el ëconócete a ti mismoû. DecÃÂan los antiguos que ese era el primer paso para conocer a los dioses y al Universo, lo que implica conocer también a todos los seres humanos con los que compartimos la existencia. Si los conocemos y nos conocemos de verdad, ÿvale la pena mentir? Cuando no hay dobleces ni ocultaciones con mala voluntad, ÿtienen sentido los subterfugios?
Algo más para continuar: controlar la fantasÃÂa degenerativa y ver la realidad con los ojos limpios. Eso no significa aceptar lo que no nos gusta de nuestro mundo circundante, sino al contrario, saber con precisión lo que nos interesa cambiar o mejorar. La fantasÃÂa cubre con velos lo que nos desagrada, pero éstos no mueven ni un grano de arena de su lugar.
Y por último, valor, mucho valor, olvidada virtud que no le falta a las piedras, a las plantas ni a los animales, pero que se esfuma en los hombres a medida que las presiones artificiales de la sociedad le vuelven temeroso y embustero.
MIRA PUDE TENER UN AMANTE OSOLO QUIERE ESTAR SOLO UN TIENPO PARA PEND¡SAR LO QUE QUIERE POR QUE NO TRATAS DE PLATICAR PERO SIN DISCUTIR Y DALE TIENPO QUE LO PIENSE PERO LA VERDA CREO QUE NO LE DA INPORTANCIA
Este tipo es inteligente!!! Bueno, debes tener evidencias irrefutables, de lo contrario no lo va a aceptar. Un amigo me dijo una vez que si mi pareja me atrapa en algo indebido, que siempre lo niegue, hasta morir!!! imaginate, los hombres somos asÃ. casi todos!!
No se siente ofendido, finge estar ofendido, es el caso clasico del manipulador y abusivo. Asì es como te usa para su conveniencia.
la verdad... yo creo que es importante que te respondas tu misma, cuando hay mentiras en una relacion es por que definitivamente el que miento no esta realmente comprometido yo creo que cuando compartes tuj vida con alguien es para ser mucho mas feliz de lo que eras sin esa persona. la honestidad es basica, si tu pareja no es honesto contigo... debes decir adios!
si miente es por que tiene algo que ocultar, y se ofende por que es su tenica para evadirte