Según he podido observar sobre todo en este último tiempo, aparentemente el autoritarismo se transfiere a través de la cadena de poder; es decir: El Presidente presiona al gobernador, quien debe ser obsecuente, pero a su vez es autoritario y déspota con sus ministros, jefes de reparticiones, empleados, público, familia.
Es decir que quien se siente sometido (o se deja someter) después ¿necesita tomar revancha con alguien más?
Copyright © 2024 Q2A.ES - All rights reserved.
Answers & Comments
Verified answer
Desde el punto de vista de la Psicología, el autoritarismo es un estilo cognitivo, es decir una manera de percibir, comprender y explicar el mundo, que en este caso, está basado en la aceptación de la información no por sí misma sino por provenir de una fuente de autoridad. No sólo los que tienen poder tienen la oportunidad de ser autoritarios, sino incluso aquellos que estando en la base de la pirámide de poder de cualquier sociedad, consideran que ellos mismos no tienen libertad de analizar y rechazar una información si no están de acuerdo con ella, cualquiera que sea la fuente de que provenga. El que encuentra natural someter su libertad de opinión o acción, obviamente cree que otros deben también someterse.
Por otro lado, el psicoanálisis también habla del mecanismo de "identificación con el agresor", así que como tú dices, los que sufren trato abusivo también suelen ser abusadores.
Las sociedades que tienen instituciones poco democráticas, en las que el ciudadano común y la civilidad organizada no pueden ejercer control sobre quienes les gobiernan, son excelente caldos de cultivo para un autoritarismo muy corrupto.
En una jerga muy prosaica esto que vos narras se llama "ley del gallinero",,pero no es algo reciente, es la llamada estructura del poder donde los de mas arriba, como en el gallinero,polucionan a los de más abajo.Es algo vulgar y tal vez un poco tosco el ejemplo, pero no menos real por eso. Un abrazo,,Orlando,,,
Tuqui;
Un comentario a tu comentario!, Por cierto bien planteado y con toda la razón. El cuestionamiento final, también es certero, es una realidad en la palestra de los polÃticos, los gobernantes y quienes ostentan el poder.
El cobro de facturas, en la jerga polÃtica, es incuestionable, desde las pequeñas a las más altas esferas.
Tu esquema corresponde a el "mal de herodes", que conste que esta escrito entre comillas y en minúsculas.
Es verdad, y un buen ejemplo es lo que dice Orlando; claro que si estás abajo y el otro "defeca" sobre ti se expone a que le realices un tacto rectal.
En verdad creo que es una actitud lamentable que por fortuna no todos incorporan pero sà se ve a diario.
¡Tuqui, Nina, cuà nto me han hecho presente mi pobre paìs! Soy de Venezuela...
Solo en el tercer mundo