Saben una cosa . Me han hecho erizar . Por dios que respuestas !! . No se ,pero creo que sin querer destape el tarro de las mejores respuestas Disculpenme , pero no me siento con competencia para elegir la mejor .
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¡La pucha que estarás orgulloso, Juan! No es para menos.
La obra de Eduardo Galeano, nos convoca a mirar qué pasado hemos levantado y qué futuro estamos dejando para nuestros descendientes.
Establece un frente común contra la pobreza, la miseria moral y material, la hipocresía de un mundo que sigue abriendo cada vez más distancias entre los que tienen y los que no tienen. Lo demagógico puede ser un riesgo inevitable en este tipo de propuestas, pero Galeano la salva con un estilo conciso, brillante y, sobre todas las cosas, necesario. En Eduardo Galeano hay un compromiso constante con el ser humano y sobre todo una fidelidad a unas ideas que condenan el neoliberalismo y que siguen apostando por un socialismo real, no de entre casa, y que de alguna forma recupere el pulso perdido, lejos del presente en el que el hombre es visto como una mercancía y en el que parece que no hay lugar para las utopías.
Eduardo Galeano reside desde 1985, (tras finalizar la dictadura uruguaya) en su (tu) Montevideo natal donde sigue haciendo su literatura y su periodismo de marcado tinte político.
En la actualidad dirige su editorial llamada "El Chanchito". (Hasta pa´titular es jodido e irónico. Un maestro )
Su narrativa está acosada por la realidad inmediata de América Latina, transformándose sus obras, traducidas a más de veinte idiomas, en un archivo histórico-cultural de todo el continente.
Mirá Juan, si lo único que hubiera hecho en su vida hubiera sido escribir “Las venas abiertas de América Latina”, creo que ya estaría cumplido y sería mérito suficiente (por suerte no se agotó con ella). Por lo menos a mi, me abrió la cabeza allá lejos y hace tiempo… y no para de hacerlo. Lo leo y releo cada tanto, cuando necesito "cargar pilas".
Su prosa es aditiva. Tiene la facultad de decir aquello que me gustaría expresar y no sé cómo hacerlo. Y ¿sabés qué es lo que admiro más de él?, ¡el tipo no se vende...!!!
No puedo con mi genio. Me había prometido no meterme con su biografía, pero…
Es tal vez "El libro de los abrazos", uno de sus libros más exitosos y logrados,y es allí donde está contenido un pequeño relato titulado "La noche". Este relato dividido en cuatro partes sirvió de inspiración a Serrat para su canción "Secreta mujer" que formó parte del álbum "Sombras de la China" (1998):
LA NOCHE / 1
No consigo dormir. Tengo una mujer atravesada entre los párpados. Si pudiera, le diría que se vaya; pero tengo una mujer atravesada en la garganta.
LA NOCHE / 2
Arránqueme, Señora, las ropas y las dudas. Desnúdeme, desnúdeme.
LA NOCHE / 3
Yo me duermo a la orilla de una mujer: yo me duermo a la orilla de un abismo.
LA NOCHE / 4
Me desprendo del abrazo, salgo a la calle.
En el cielo, ya clareando, se dibuja, finita, la luna.
La luna tiene dos noches de edad.
Yo, una.
Merecido homenaje, al que me adhiero (aplaudiéndolo y de pie).
Mi admiración me movió 10 meses atrás, a hacer una pregunta sobre él.
Te invito a leerla, no te pierdas las respuestas, sobre todo la dada por Betozav
http://ar.answers.yahoo.com/question/index;_ylt=Ag...
Te pasaste, Juan. Excelente pregunta. Hoy, somos todos uruguayos. Que el Mercosur comience a mostrarse premiando a titanes de la cultura, es buen augurio.
Eduardo Galeano en Italia - (Escuchalo, está -como siempre- impagable)
http://www.youtube.com/watch?v=XN_Hcirqrmo
Un beso
Marta
Amigo ¡enhorabuena!
Lugo, que asumirá el mando el mes próximo en Paraguay, dijo, evocando una leyenda indÃgena que "siempre hay una cuerda sagrada, una mano que nos sostiene del paisaje de nuesta identidad, en la gente como Eduardo Galeano que ha sido y es nuestra voz, en ella abreva la inmensa paz de nuestras luchas y de sus manos contadoras de historias ya se escribe en la tinta indeleble de nuestra esperanza, la historia de la América Latina que, más temprano que tarde, empezará a vivir sus cien años de solidaridad",
Me hago eco de su mensaje Juan y con ellas vaya también mi homenaje
Chaucito.
Tampoco yo mi hermano voy a hablar de su figura, pues harto conocida nos es.
Tarde me enteré aquà en Madrid del hecho que nos llena de orgullo. Destaco de sus dichos el que, para el homenajeado, el "verdadero primer ciudadano ilustre de la región" fue el prócer, general José Gervasio Artigas, lÃder de las luchas de independencia de varios paÃses en Sudamérica, del dominio de España.
Hasta en esas sus palabras denota grandeza.
Les felicito amigo. Adhiero a Mamushka, y hoy me proclamo yo también uruguayo. ¡Por una Patria Grande!
Mis respetos desde Madrid
Marco
Ahunó, en sà mismo el periodismo, el ensayo y la narrativa, siendo ante todo un cronista de su tiempo, certero y valiente, que ha retratado con agudeza la sociedad contemporánea, penetrando en sus lacras y en sus fantasmas cotidianos. Lo periodÃstico vertebra su obra de manera prioritaria. De tal modo que no es posible escindir su labor literaria de su faceta como periodista comprometido.
Con "Las venas abiertas de América latina" (1971), explicativo tÃtulo, logró su obra más popular y citada, condenando la opresión de un continente a través de páginas brutalmente esclarecedoras que se sumergen en la amargura creciente y endémica de América Latina. Esta obra ha sido traducida a dieciocho idiomas y mereció encendidos elogios desde diversos sectores. El escritor alemán Heinrich Böll, Premio Nobel de Literatura en 1972 y autor de "Opiniones de un payaso", obra clave de la literatura contemporánea, llegó a decir a propósito de la obra de Galeano que pocas obras en los últimos tiempos le habÃan conmovido tanto
Como corolario te dejo algunas frases de Don Eduardo Galeano:
La utopÃa está en el horizonte. Camino dos pasos, ella se aleja dos pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. ¿Entonces para que sirve la utopÃa? Para eso, sirve para caminar.
La caridad es humillante porque se ejerce verticalmente y desde arriba; la solidaridad es horizontal e implica respetuo mutuo.
Yo escribo para quienes no pueden leerme. Los de abajo, los que esperan desde hace siglos en la cola de la historia, no saben leer o no tienen con qué.
En qué se parece el fútbol a Dios? En la devoción que le tienen muchos creyentes y en la desconfianza que le tienen muchos intelectuales
Hay un único lugar donde ayer y hoy se encuentran y se reconocen y se abrazan. Ese lugar es mañana.
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Frases de Eduardo Galeano
Eduardo Galeano
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Al fin y al cabo, somos lo que hacemos para cambiar lo que somos.
Fin
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Hay un único lugar donde ayer y hoy se encuentran y se reconocen y se abrazan. Ese lugar es mañana.
Mañana
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Hay quienes creen que el destino descansa en las rodillas de los dioses, pero la verdad es que trabaja, como un desafÃo candente, sobre las conciencias de los hombres.
Destino
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Quien no está preso de la necesidad, está preso del miedo: unos no duermen por la ansiedad de tener las cosas que no tienen, y otros no duermen por el pánico de perder las cosas que tienen.
Son cosas chiquitas. No acaban con la pobreza, no nos sacan del subdesarrollo, no socializan los medios de producción y de cambio, no expropian las cuevas de Alà Babá. Pero quizá desencadenen la alegrÃa de hacer, y la traduzcan en actos. Y al fin y al cabo, actuar sobre la realidad y cambiarla, aunque sea un poquito, es la única manera de probar que la realidad es transformable.
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Frases de Eduardo Galeano
Eduardo Galeano
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Hay un único lugar donde ayer y hoy se encuentran y se reconocen y se abrazan. Ese lugar es mañana.
Hay quienes creen que el destino descansa en las rodillas de los dioses, pero la verdad es que trabaja, como un desafÃo candente, sobre las conciencias de los hom
Quien no está preso de la necesidad, está preso del miedo: unos no duermen por la ansiedad de tener las cosas que no tienen, y otros no duermen por el pánico de perder las cosas que tienen.
La industria norteamericana de armamentos practica la lucha contra el terrorismo vendiendo armas a gobiernos terroristas, cuya única relación con los derechos humanos consiste en que hacen todo lo posible por aniquilarlos
La violencia engendra violencia, como se sabe; pero también engendra ganancias para la industria de la violencia, que la vende como espectáculo y la convierte en objeto de consumo
Son cosas chiquitas. No acaban con la pobreza, no nos sacan del subdesarrollo, no socializan los medios de producción y de cambio, no expropian las cuevas de Alà Babá. Pero quizá desencadenen la alegrÃa de hacer, y la traduzcan en actos. Y al fin y al cabo, actuar sobre la realidad y cambiarla, aunque sea un poquito, es la única manera de probar que la realidad es transforma
Yo escribo para quienes no pueden leerme. Los de abajo, los que esperan desde hace siglos en la cola de la historia, no saben leer o no tienen con qué.
La utopÃa está en el horizonte. Camino dos pasos, ella se aleja dos pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. ¿Entonces para que sirve la utopÃa? Para eso, sirve para caminar.
La caridad es humillante porque se ejerce verticalmente y desde arriba; la solidaridad es horizontal e implica respetuo mutuo.
No consigo dormir. Tengo una mujer atravesada entre los párpados. Si pudiera, le dirÃa que se vaya; pero tengo una mujer atravesada en la garganta.
...Y finalmente, una de mis favoritas:
AL FIN Y AL CABO, SOMOS LO QUE HACEMOS, PARA CAMBIAR LO QUE SOMOS.
Su mérito ha sido ser un pensador, un analista de nuestros pueblos.
Su mérito ha sido provocar la reflexión en nosotros, los lectores.
Su mérito ha sido crear hermosa poesÃa relacionada con nuestros pueblos y con nuestra humanidad.
Creo que por escribir dos o tres cosillas......
Su narrativa está acosada por la realidad inmediata de la América Latina. Esta caracterÃstica se revela en su prolÃfica obra. Entre sus libros se destacan: Los dÃas siguientes (1963), Guatemala, paÃs ocupado (1967), Las venas abiertas de América Latina (1971), Vagamundo (1973), La canción de nosotros (1975), DÃas y noches de amor y de guerra (1978), Las caras y las máscaras (1984), Memorias del fuego (1986), una trilogÃa que en 1989 fue galardonada con el American Book Award, y El libro de los abrazos (1989). En 1993 publicó Las palabras andantes, en 1995 El fútbol a sol y a sombra, y en 1998 Patas arriba: la escuela del mundo al revés.
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